Elon Musk suspende compra de Twitter y se desploman las acciones en Wall Street

El empresario sudafricano, Elon Musk, dueño de Tesla y SpaceX, anunció que la compra de Twitter por US$44.000 millones que había anunciado días atrás está “temporalmente suspendida”.

“El acuerdo de Twitter está temporalmente en suspenso a la espera de detalles que respalden el cálculo de que las cuentas de spam/falsas representan menos del 5% de los usuarios”, tuiteó Musk el viernes en la misma plataforma.

El anuncio supuso un revés para las acciones de la compañía que cotizan en Wall Street: cayeron casi un 25% en las operaciones previas a la apertura del mercado el viernes por la mañana.

El acuerdo de compra de Twitter por parte del empresario, heredero de una fortuna hecha por su padre en minas de esmeraldas en África, se dio después de turbulentas semanas en las que primero compró una parte de las acciones y se unió inicialmente a la junta directiva. Luego, cambió de parecer y rechazó unirse a esa mesa de accionistas y avanzó por una adquisición hostil.

El directorio de la compañía trató de “contaminar” el trato con una movida conocida como “píldora venenosa”, que consiste en que los accionistas existentes compren acciones adicionales con descuento, lo que diluye la participación del nuevo comprador hostil.

La táctica no funcionó y a final de abril se anunció que aceptarían la oferta de Musk por una montaña de dinero: desembolsaría US$54.20 por acción en efectivo, totalizando US$44.000 millones.

Hola de nuevo, Donald

Musk asegura que compra la red social para potenciar la libertad de expresión, pero sus detractores alertan que podría alentar más bien la difusión de noticias falsas (fake news).

Hay especial preocupación porque anunció que, de confirmarse la compra, levantaría el veto al expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, quien fue expulsado después de perder en los últimos comicios presidenciales contra Joe Biden por afirmar falsamente que hubo fraude y que Biden se había “robado” la elección.

Trump lanzó su propia red social semanas después pero fracasó y la volvió a cerrar tiempo después. Luego, apostó otra vez por una nueva red social llamada Truth Social, que se llenó de conspiracionistas, apologistas de discursos de oido y militantes de extrema derecha que han sido echados de otros lugares.