Carrera espacial de ricos: empleados de Blue Origin no se subirían a sus cohetes

Una facción de los empleados actuales y anteriores de la empresa aeroespacial Blue Origin, del multimillonario fundador de Amazon, Jeff Bezos, escribieron una carta pública recientemente en la cual cuestionan el compromiso de la compañía por la seguridad de los cohetes.

La carta, que llegó a las salas de redacción de medios internacionales de Estados Unidos y otros países, afirma que la empresa tiene una cultura de seguridad deficiente sobre sus cohetes. Los problemas son tan graves que los autores dicen que no se sentirían seguros viajando en un cohete Blue Origin, si tuviesen la oportunidad.

“Muchos de nosotros hemos pasado nuestras carreras soñando con ayudar a lanzar un cohete tripulado al espacio y verlo aterrizar de manera segura en la Tierra”, escribieron los empleados. “Pero cuando Jeff Bezos voló al espacio en julio, no compartimos su alegría. En cambio, muchos de nosotros miramos con una abrumadora sensación de inquietud. Algunos de nosotros no soportamos si quiera ver el vuelo”.

Entorno laboral tóxico

Los suscriptores de la carta no explican exactamente cuáles son los problemas de seguridad con el cohete New Shepard, pero describen una cultura laboral en la cual los equipos están sobrecargados de responsabilidades y cada vez más trabajo acumulado, sin aumentos razonables de personal, presupuestos o salarios.

Esa cultura, junto con la falta de regulaciones de seguridad generales para la naciente industria de vuelos espaciales comerciales, argumentan, obligó al personal a priorizar la velocidad sobre la seguridad, lo que aumenta las posibilidades de que los problemas de seguridad pasen desapercibidos.

“Blue Origin ha tenido suerte de que no haya sucedido nada hasta ahora”, contribuyó un ingeniero firmante de la carta que prefirió mantener su anonimato. “Muchos de los autores de este ensayo dicen que no volarían en un vehículo Blue Origin. Y no es de extrañar, todos hemos visto la frecuencia con la que los equipos se estiran más allá de los límites razonables”, alerta la misiva.

Bezos compite cabeza a cabeza con la compañía de otro multimillonario, Elon Musk, fundador de la empresa de autos Tesla y de la aeroespacial SpaceX. Ambos ofrecen vuelos espaciales para turistas que valen decenas de millones de dólares por asiento, convirtiendo esta carrera espacial en el nuevo hobbie de los ultrarricos.