Antivacunas empiezan a usar mascarillas “para protegerse del peligro de los vacunados”
Las teorías conspirativas mueven a los antivacunas a no usar mascarillas, pero ahora se sienten en “peligro” frente a los que ya se han inmunizado.
Movimientos de conspiracionistas de la pandemia del COVID-19 han empezado a cambiar su enfoque: hasta ahora, se han rehusado a usar mascarillas negando la existencia del virus y, por consecuencia, poniéndose en riesgo a sí mismos y a terceras personas.
Pero una nueva teoría conspirativa se ha apoderado de las redes sociales y los foros de internet, la cual asegura que los vacunados supuestamente “arrojarían” ciertas proteínas sobre los no vacunados, quienes luego sufrirán efectos adversos.
Entre los efectos que aseguran sufrirán los no inmunizados están problemas para menstruar, infertilidad y abortos espontáneos. Esta teoría se basa en otra más grandilocuente, que asegura que el COVID-19 es una “estrategia” para despoblar al mundo y que las vacunas matarán a cientos de millones.
Los expertos dicen que la conspiración nace de un malentendido fundamental de cómo funcionan las vacunas. Ha sido ampliamente desacreditado y puede leerse aquí , aquí y aquí , entre otros lugares.
Así las cosas, influencers antivacunas (antivax, o antivaxxers, como se dice popularmente en inglés), están recomendando a sus seguidores y fans que usen mascarilla para “protegerse” de los supuestos peligros de los inoculados. Sherri Tenpenny, una conocida influencer estadounidense sugirió en una transmisión en vivo por redes sociales que “es posible que tengas que mantenerte alejado de alguien que ha recibido estas vacunas… para siempre”.
Otro destacado antivacunas, el pediatra neoyorquino Larry Palevsky, sugirió que debería ponerse en aislamiento a las personas que han recibido su dosis. “Hay algo que se transmite de las personas a las que se les inyecta este veneno a otras que no han recibido la vacuna”, aseveró también por medio de un streaming en redes sociales. Y fue más allá: insinuó que deberían tener una suerte de insignia obligatoria que diga “me han vacunado, aunque no es una vacuna, para que sepamos evitarlos en la calle y no nos acerquemos a ellos en ningún lugar social”.
Ahora se enmascaran
Todo esto pone a los antivacunas en un nuevo predicamento: además de rehusarse a inocularse contra el COVID-19 se niegan a muerte a usar tapabocas o mascarilla en lugares públicos o privados donde se les exijan.
Ahora, estarían optando más bien por ponerse la mascarilla, tal como se lee en una discusión en el infame foro de la internet oscura 4Chan. “Debemos usar una máscara alrededor de los vacunados, porque desprenden ARNm (ácido ribonucleico mensajero, una de las tecnologías usadas para las vacunas)”, cuestionaba un usuario anónimo
“¿Mi familia va a necesitar usar mascarillas para protegernos de los vacunados?”, preguntó otra persona en Twitter, también de forma anónima.
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