hidratación en invierno

La importancia de mantenerse hidratado en Invierno: un bienestar olvidado

¿Sabías que el riesgo de deshidratación aumenta en invierno? Descubre por qué y cómo evitarlo.

tomar agua en invierno

El invierno trae temperaturas bajas y aire seco (o húmedo, depende de dónde vivas), condiciones que pueden afectar la hidratación del cuerpo tanto como en el verano. Sin embargo, la sensación de sed disminuye en climas fríos, lo que puede llevar a una menor ingesta de líquidos.

Vamos a analizar brevemente cómo la hidratación es igualmente importante durante el invierno para mantener el cuerpo funcionando de manera óptima.

Aunque nuestra percepción de sed disminuye en invierno, el cuerpo sigue requiriendo una ingesta regular de líquidos. El Dr. Lawrence E. Armstrong, un destacado profesor de fisiología con estudios en la Universidad de Connecticut, señala que «la deshidratación leve puede afectar negativamente el estado de ánimo, el nivel de energía y la capacidad cognitiva». Esto es respaldado por un estudio de Armstrong publicado en la revista Journal of the American College of Nutrition.

 

No olvides tomar agua en invierno, aunque no tengas sed

La hidratación adecuada es vital para mantener la salud y prevenir enfermedades. Según un informe de la Clínica Mayo, el agua es esencial para numerosos procesos corporales, incluidos la regulación de la temperatura, la eliminación de desechos y la lubricación de las articulaciones. En invierno, el aire seco y la calefacción interior intensifican la pérdida de humedad, lo que exige una mayor ingesta de líquidos.

El sistema inmunológico también se beneficia de una correcta hidratación. Un artículo de la Universidad de California, Riverside, resalta que el agua ayuda a mantener las membranas mucosas hidratadas, lo que es crucial para que actúen como barreras contra virus y bacterias. Durante la temporada de resfriados y gripe, esto hace que la hidratación sea aún más importante.

 

Alerta a las señales de la deshidratación

La deshidratación puede tener diversas consecuencias en el cuerpo. Según un estudio publicado en la revista Physiology & Behavior, incluso una deshidratación leve puede llevar a dificultades en la concentración, memoria a corto plazo y actividad mental. Esto es particularmente relevante durante el invierno, cuando el cansancio y la falta de concentración pueden ser síntomas de deshidratación no reconocida.

La piel también se ve afectada en invierno. El aire frío y seco puede causar sequedad y grietas en la piel, exacerbadas por una falta de hidratación adecuada. Una investigación del British Journal of Dermatology muestra que una hidratación insuficiente contribuye a una menor elasticidad de la piel y un mayor riesgo de daños.

Para mantenerse bien hidratado durante los meses de invierno, es recomendable:

  1. Beber agua con frecuencia: Aunque la sed no sea tan evidente, es importante desarrollar el hábito de beber agua regularmente. La Academia Nacional de Medicina recomienda una ingesta diaria de aproximadamente 3.7 litros para hombres y 2.7 litros para mujeres, aunque estas cantidades pueden variar según factores individuales como la actividad física y el entorno.
  2. Optar por bebidas calientes: Las infusiones, tés y caldos no solo ayudan a mantener la temperatura corporal, sino que también contribuyen a la ingesta total de líquidos. Es importante evitar bebidas que puedan causar una deshidratación, como las que contienen cafeína en exceso. Ten en cuenta que las bebidas con cafeína, teína o mateína son diuréticas, o sea que te pueden hacer perder líquidos. Puedes optar por infusiones de otras hierbas que no sean diuréticas para que el agua se absorba correctamente.
  3. Consumir alimentos ricos en agua: Las frutas y verduras como naranjas, manzanas, pepinos y zanahorias tienen un alto contenido de agua y pueden ser una excelente opción para complementar la hidratación.
  4. Monitorear tu orina: Un método simple para verificar la hidratación es observar el color de la orina. Un color claro generalmente indica una buena hidratación, mientras que una orina más oscura sugiere la necesidad de más líquidos.

Fuentes:

  • Armstrong, L. E., Johnson, E. C. (2010). «Water intake, water balance, and the elusive daily water requirement.» Journal of the American College of Nutrition.
  • Mayo Clinic Staff. (2021). «Water: How much should you drink every day?» Mayo Clinic.
  • University of California, Riverside. (2020). «Fluids and Hydration.»
  • Proksch, E., Brandner, J. M., Jensen, J. M. (2008). «The skin: an indispensable barrier.» British Journal of Dermatology.

 

 

 

Te recomendamos

Publicá tu comentario

Compartí tu opinión con toda la comunidad

chat_bubble
Si no puedes comentar, envianos un mensaje