La crianza consciente: Entrevista con el Dr. Cristian Plep de MP

La importancia de estar presentes

«Ser consciente en la crianza implica estar realmente presentes, habitando el momento. Esto incluye ser conscientes de lo que está sucediendo afuera y, especialmente, de nuestro estado interno», comentó el Dr. Plep.  «Nuestras decisiones diarias están influenciadas por factores externos, pero la claridad y la calma con las que tomamos esas decisiones dependen más de nuestro estado interno, subrayó el especialista de MP.

Los niños, según el Dr. Plep, son grandes maestros en desafiar a los padres a permanecer presentes. «Ellos tienden a hacer las cosas que no deben hacer en los momentos más inoportunos, lo que nos obliga a reaccionar de manera impulsiva», explicó. La crianza en tiempos de incertidumbre y volatilidad nos obliga a los padres a aprender a estar presentes, elevando nuestro nivel de conciencia para tomar decisiones de manera más calmada y reflexiva.

Modelar el comportamiento

El Dr. Plep destacó que educar desde una crianza consciente implica modelar el comportamiento adecuado. «Los niños aprenden no solo por imitación, sino también por resonancia. No solo observan lo externo, sino que también sienten la coherencia de nuestras acciones», afirmó. La congruencia entre lo que decimos y hacemos es esencial para una educación efectiva.

Ritmos, rutinas y educación holística

Los seres humanos, al igual que la naturaleza, somos seres rítmicos. El Dr. Plep explicó que nuestro cuerpo y mente tienen ritmos diferentes. «El ritmo biológico del cuerpo y del ser presente es uno, mientras que el ritmo de la mente, que está en modo de supervivencia, es otro», indicó. Es crucial respetar los ritmos individuales de cada persona, especialmente de los niños, para fomentar un ambiente de aprendizaje saludable.

El Dr. Plep abogó por una educación que no solo se centre en la mente racional, sino que también integre el corazón, el cuerpo y las emociones. «Hoy entendemos que la mente es una herramienta de supervivencia, pero también necesitamos comprender cómo funcionan las emociones y el corazón», señaló. Respetar los ritmos individuales y fomentar rituales saludables puede ayudar a reconectar con nuestro estado de presencia.

El rol de los padres

En tiempos de alto estrés y volatilidad, los niños son los que más sufren, y los padres, a menudo desconectados, buscan soluciones externas. El Dr. Plep enfatizó que los niños nos obligan a recuperar nuestros estados de presencia. «En esa presencia, el adulto es congruente tanto interna como externamente, y los niños necesitan esa coherencia para sentirse seguros», explicó.

La crianza consciente, según el Dr. Plep, nos ayuda a practicar y modelar cualidades emocionales esenciales para el desarrollo de la inteligencia emocional en los niños. Estas cualidades incluyen el amor incondicional, la empatía, la compasión y la paz. «Hoy más que nunca, debemos recuperar los ritmos, rituales y rutinas que nos conectan con nuestro estado de presencia», concluyó el médico psiquiatra de MP Medicina Personalizada.