Biocultura y Salud: La pandemia del coronavirus es consecuencia del irrespeto a la naturaleza
En el regreso del programa Biocultura y Salud, especialistas en salud analizan la situación de la pandemia y cómo el irrespeto de la humanidad a la naturaleza ha llevado a que estemos todos afectados por el coronavirus.
En el primer programa de 2020 de Biocultura y Salud, conversaron los integrantes del panel, que estará compuesto en todos sus programas por el Dr. Claudio Esteve, presidente de la Organización Mundial de Ciencias Naturopáticas con sede en España y radicado en Argentina; el Dr. Jesús Costa, director de la clínica Medicina Biológica Vitalista en Uruguay; la Nutricionista Georgina Kuttel, experta en alimentación natural, nutrición ayurveda y profesora de cocina saludable desde Argentina; el productor agropecuario Marcelo Braselli desde Tacuarembó, Uruguay, y Fredy Fasano, director de LARED21 desde Montevideo, Uruguay.
Según comentó el doctor Esteve, lo que nos ha llevado a la situación en que se encuentra el mundo en este momento es que «el ser humano no produce cuidando el medio ambiente, porque lo mismo que se produce hoy se podría producir cuidando el ambiente».
«Este virus apareció, consecuentemente a destruir el medio ambiente, a la utilización de animales exóticos para cuestiones de placer. En general todas las epidemias hasta ahora vienen del reino animal y vienen del maltrato del hombre hacia los animales: la porcina del cerdo, la aviar de las aves, el HIV de los monos africanos, y lo mismo el H1N1, la gripe española que también fue porcina -que dejó un tendal de 6 millones de muertos y que tuvo una doble oleada de contagios- y, en este caso (el COVID-19) se cree que se originó en un mercado de animales exóticos de Wuhan, en donde se mezclan virus, bacterias, y demás, en un estado totalmente antinatural, en jaulas, mal alimentados, con mucho estrés, y todo eso es faltarle el respeto a la naturaleza», dijo Esteve.
«El ser humano tiene una participación directamente proporcional al ‘karma’ que está sufriendo ahora, y es por acción y por omisión», añadió.
La nutricionista Georgina Kuttel comentó que el consumo de animales se ha movido hacia priorizar la productividad por encima del bienestar animal, y enumeró acciones como la aplicación desmedida de hormonas en pollos para que den más carne, o cómo se estimula también a las vacas para que produzcan leche de forma desmedida mientras se les separa de sus terneros. «Todo ese sufrimiento que se genera no es gratis, y tendremos consecuencias como humanidad. Todo esto es parte de ese desajuste en el equilibrio natural que el ser humano ha provocado creyéndonos más que el resto de los animales, y ese provecho que se saca de los seres vivos de manera forzada y antiética», reflexionó.
Kuttel abogo porque la humanidad camine hacia la simbiosis con la naturaleza: «Hay que replantearnos el respeto por todo lo que nos rodea porque nosotros somos esa naturaleza; la única manera de no dañar es empezar a sentirnos parte de eso».
Sobre la realidad del campo y el manejo de los animales en las industrias, el productor agropecuario Marcelo Braselli comentó que hay dos modelos: uno intensivo y otro extensivo. «Yo siempre hice un tipo de ganadería extensivo donde no se agrede al medio ambiente y en el que los montes han proliferado, al menos desde que yo vine acá (a Tacuarembó), y bueno, la otra forma es meter cuarenta máquinas y darle vuelta a todo, son dos formas distintas: una en la que el animal está en total hacinamiento y la otra en que está libre y camina por el pasto, tiene que ir hasta el arroyo a tomar agua», explicó.
«Yo sé que hay campos super envenenados y sistemas de crianzas de pollos y peces con mucho hacinamiento, y si lo ves te asusta, porque la cantidad de animales por metro cuadrado es impresionante. Imagínense todos esos animales sucios, estresados, mal alimentados, metidos en una feria en China…», continuó.
El doctor Jesús Costa también estuvo de acuerdo en que el antropocentrismo es la causante de los males que está sufriendo la naturaleza. «Hay que volver a lo que somos: hijos de la naturaleza. Nos hemos alejado de ella y así estamos. Nosotros nos hemos ubicado en un lugar que no nos corresponde y tenemos una visión antropo-ecológica, o sea que nos pusimos en el centro del universo por ese narcisismo que todos tenemos. Creemos que somos tan importantes y tan poderosos que creemos que tenemos el derecho de explotar todos los recursos naturales y esa es una gran equivocación», expresó.
Escucha el programa completo acá:
Compartí tu opinión con toda la comunidad