Valeria Ripoll, exsindicalista, criticó que el FA esté “comido” por el PIT-CNT

Valeria Ripoll, candidata a la vicepresidencia por el Partido Nacional, arrojó críticas contundentes hacia el Frente Amplio (FA) en una reciente entrevista. Según Ripoll, el PIT-CNT ha adquirido una influencia desproporcionada sobre el FA, afirmando que “el PIT-CNT se comió al Frente Amplio”.

Esto, argumenta, se refleja en el próximo plebiscito sobre la seguridad social, que se realizará el 27 de octubre. La misma Ripoll, otrora dirigente sindical en la Asociación de Empleados y Obreros Municipales (ADEOM), ahora devino en candidata vicepresidencial del partido oficialista de derecha, que tiene esperanzas en darle continuidad a las políticas liberales de Luis Lacalle Pou. De dicho Ejecutivo, su compañero de fórmula, Álvaro Delgado, fue el secretario de Presidencia por casi todo el término, y en muchas ocasiones hizo las veces de vocero.

Ripoll sostiene que la composición actual de liderazgos sindicales ha desviado el rumbo del FA. En sus declaraciones señala que, lo que, a su juicio, demuestra un poder sin precedentes del movimiento sindical dentro del partido político. Esta afirmación plantea interrogantes sobre la capacidad del FA para moderar su discurso y conectar con otros sectores de la sociedad.

Ripoll asegura que hay demasiados sindicalistas y rupturas en el Frente Amplio

La candidata critica la forma en que, según ella, el FA ha “lidiado con las tensiones internas, señalando que “el Partido Comunista, el Partido Socialista y el PIT-CNT han logrado quebrarle el brazo a los moderados”. En este contexto, asevera que el Movimiento de Participación Popular (MPP) intenta posicionarse como un partido de centro, un esfuerzo que Ripoll considera engañoso. “Vas a la feria y hay gente del MPP entregando papeletas”, enfatizó, sugiriendo así una falta de autenticidad en la postura actual del movimiento.

A través de sus observaciones, Ripoll presenta al FA como incapaz de representar adecuadamente a los trabajadores. Llama la atención sobre cómo la evolución histórica del movimiento sindical ha sido interpretada de manera sesgada, donde se ha minimizado la contribución de otros actores sociales y políticos previos a la existencia del FA. Según su análisis, “la historia del Uruguay no nació cuando se creó el FA”.