José Mujica salió del Casmu: estuvo ingresado por su tratamiento por el cáncer

El pasado martes en la mañana, el expresidente José Mujica fue ingresado en el sanatorio Casmu. La hospitalización se da tras haberse sometido a sesiones de radioterapia debido a un cáncer de esófago. Permaneció en observación varias horas para realizar estudios que controlen sus valores clínicos.

Durante las últimas semanas, Mujica completó un tratamiento intensivo de radioterapia, destinado a combatir el cáncer que le fue diagnosticado. La decisión de internarlo nuevamente se debió a complicaciones surgidas después de que intentara recibir tratamiento ambulatorio en su hogar, donde el suministro de suero fue imposible por problemas venosos.

Complicaciones médicas en la recuperación

Las dificultades para administrar el suero intravenoso surgen de una condición preexistente: vasculitis, que afecta las venas y de la cual Mujica ha sido paciente durante años. Debido a esta situación, el equipo médico en el Casmu continuará monitoreándolo de cerca, realizando estudios adicionales para garantizar el control del cáncer y asegurar una recuperación adecuada.

Además del monitoreo, Mujica espera los resultados de un último examen médico quetodo ok determinará si la radioterapia ha sido efectiva en reducir el tumor. Durante una reciente entrevista con The New York Times, el expresidente expresó buenas expectativas sobre su estado de salud. Sin embargo, también reflexionó sobre el proceso de enfrentar su enfermedad a los 89 años.

Reflexiones sobre la vida y la enfermedad

En dicha entrevista, Mujica mostró un tono filosófico y reflexionó sobre su propia mortalidad. “La vida es hermosa. Con todas sus peripecias, amo la vida. Y la estoy perdiendo porque estoy en el tiempo de irme,” afirmó. Estas declaraciones reflejan su actitud de aceptación frente a la enfermedad y su deseo de ser recordado no solo por su carrera política sino también por su humanidad.

Mujica, quien gobernó Uruguay entre 2010 y 2015, también compartió sus pensamientos sobre el significado de la vida. Señaló la importancia de “luchar por la felicidad, no sólo por la riqueza” y destacó su admiración por la naturaleza. Aunque se considera agnóstico, respeta las creencias religiosas como un medio para enfrentar la idea de la muerte.

Expectativas médicas y sus próximos pasos

El diagnóstico de cáncer de esófago se hizo público a fines de abril, junto con el plan de llevar a cabo 30 sesiones de radioterapia. Estos tratamientos terminaron en junio y, desde entonces, Mujica ha pasado por una serie de pruebas médicas para verificar el progreso. Recientemente, se llevó a cabo una ecografía que no mostró anomalías, pero aún falta una endoscopía para confirmar la disminución del tumor.

Lucía Topolansky, exvicepresidenta y esposa de Mujica, mencionó que aunque su esposo presenta un panorama clínico favorable, aún enfrenta una considerable debilidad física. “Clínicamente, tiene un panorama bastante positivo, pero ahora tiene mucha debilidad. Tiene que poder empezar a recuperar fuerzas,” precisó.

La familia y los partidarios de Mujica permanecen esperanzados ante los informes médicos que sugieren un resultado positivo. Sin embargo, el camino hacia la recuperación completa sigue en curso, con el expresidente luchando por recuperar su fuerza física. “Él está bien, pero peleando para poder estar mejor,” añadió Topolansky, subrayando la actitud persistente de Mujica frente a los desafíos de salud.