Entrevista a Marset: Patricia Martín dice que “es obvio que los vuelos son clandestinos”

La entevista hecha por Santo y Seña al peligroso narcotraficante uruguayo, Sebastián Marset, prófugo de la Justicia internacional, sigue dando de qué hablar. La conversación fue realizada por la periodista y productora del espacio, Patricia Martín, quien viajó a Paraguay por medios que aún se discuten.

En redes sociales se viralizaron videos y capturas de pantalla en donde se cuestionaba que la entrevista se realizó, mostrando presuntas incongruencias entre los planos y los tatuajes que tiene Marset. “Ahora me rio, pero estaba muy enojada con mucha gente”, empezó Martín antes de la emisión de la segunda parte, y mostró los mencionados videos virales. “Igualmente, están teniendo muchas visualizaciones gracias a mí”, agregó.

Con respecto a las críticas de las autoridades paraguayas, Martín expresó: “Me parece una vergüenza y me da mucha lástima que haya policías paraguayos negando esta entrevista”. En el programa se incluyeron discursos de diversas autoridades, incluido Rubén Aguilar, actual director de Aeropuertos de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac), quien había negado que Martín hubiera utilizado dos helicópteros.

La respuesta de Martín fue que no había revelado detalles sobre sus desplazamientos en Paraguay para evitar poner en riesgo la seguridad de Marset. Admitió que había tomado un segundo avión dentro del país, hacia Ciudad del Este, y fue después de eso que utilizó los helicópteros proporcionados por el narcotraficante.

“A los paraguayos les llevó una semana darse cuenta de mis viajes, que hice con mi propia cédula de manera totalmente legal”, apuntó, y agregó: “Es obvio que esos vuelos fueron clandestinos. Estuve que contacto con varios colegas paraguayos y lo que me dicen es que en Paraguay hay 20 avionetas por día clandestinas que tiran droga, eso se sabe”.

¿Son incongruentes los planos de cámara?

La periodista explicó que viajó sin camarógrafos y que los teléfonos los puso la gente de Marset. “Ahora, hablan de que hay una tercera cámara, por el contraplano mío. La gente que fue entrevistada por mí me decía que se notaba que quienes me cuestionaban no habían sido entrevistados por Santo y Seña”, explicó.

Remarcó que tuvo que ser su propia camarógrafa con los equipos que tenía a mano. En el transcurso del programa, es común que las entrevistas se realicen fuera del estudio utilizando dos cámaras: una enfocada en un plano general que abarca al periodista y al entrevistado, y otra centrada exclusivamente en el entrevistado. Para agregar más imágenes, Patricia Martín explicó que se recurre a un contraplano que, en este caso, resulta ser manipulado.

En este contexto, Martín solicitó a Marset que permaneciera sentado mientras la cámara lo capturaba de espaldas, con ella en primer plano. El contenido de la conversación en esos momentos era secundario, ya que el objetivo principal era obtener breves segmentos de la expresión facial de la periodista para luego insertarlos de manera intercalada durante la entrevista.

“Si ven la imagen, Marset tiene de fondo la cortina, pero y tengo la casa de fondo y ellos no querían que se viera. Entonces yo me cambié de sillón con Marset, por eso se me ve de fondo una cortina que coincide, porque es efectivamente la misma cortina”, contestó ante la pregunta de la coincidencia de fondo.

“Cuando vos hacés una entrevista no se puede romper el eje y yo rompí el eje con el contraplano, por eso lo que hicieron los editores fue espejarlo, por eso, parece que se ve el cuello izquierdo, pero es el derecho”, prosiguió.