Lacalle inauguró el hospital del Cerro: fue recibido con carteles críticos y militantes del PN

El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, dio un discurso en la inauguración del hospital del Cerro, una obra con la que espera hacerse del beneplácito de los lugareños, que lo recibieron con poco entusiasmo, en realidad.

“Porque se hace y no se dice. Y porque de acciones que no son puramente materiales pero son conceptuales y de libertad allí estuvo la vocación social del gobierno. Cuando muchos pedían cuarentena obligatoria nosotros nos negamos. Nosotros nos negamos a encerrar a la gente que tenía que llevar el peso para la casa. No debe haber acción más difícil y revolucionaria que darle la libertad a la gente”, recordó el mandatario en alusión a su política de “libertad responsable” que fue ampliamente criticada.

«Yo me bajé un par de cuadras porque vi una veterana que venía con el bastón y un matrimonio con la bandera de Uruguay y quise saludar. Se me acercó una señora, una muchacha relativamente joven, y me dijo ‘yo no soy de los tuyos, yo soy del Frente Amplio, pero la verdad que esto te lo tengo que agradecer porque es para toda la barriada del Cerro'», contó el presidente.

Lacalle y los mensajes de poca bienvenida en el Cerro

El presidente derechista está tratando de manejar la que, posiblemente, es la peor crisis política que ha tenido en su administración, de varias que ha atravesado. Después del escándalo por su amigo personal, Gustavo Penadés, quien está acusado de varios delitos de abuso sexual de menores y otros afines, ahora ve cómo varios jerarcas de su administración (y también amigos cercanos) renuncian en medio del otorgamiento del pasaporte por parte de su administración al narco uruguayo, Sebastián Marset.

Él ha afirmado saber poco y nada de por qué y cómo se dio lo del pasaporte, pero los residentes del Cerro de Montevideo lo recibieron con una pancarta alusiva a esto: «Con un ‘hospitalito’ no se tapa la corrupción, la mafia, ni el hambre de los niños», decía un que se veía a la distancia.

«Renuncias, no destitución», decía otro, y «gobierno corrupto», una más que se veía entre las decenas de personas que se hicieron presentes.

Por supuesto, la comunicación oficial del gobierno evitó compartir fotografías en las cuales se veían esos mensajes, y prefirieron enfocar un pasacalles que rezaba: «gracias por cumplir: tenemos hospital».