Comisión del Senado archiva juicio político contra Cosse. Ni la coalición lo iba a votar
El “desmedido” juicio político contra la intendenta de Montevideo quedará en el recuerdo sin siquiera haber llegado a la agenda del Parlamento. Los legisladores oficialistas tampoco estaban afines a votarlo.
La Comisión de Constitución y Código del Senado ha anunciado que archivará el juicio político contra la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, por lo que este quedará sin efecto y no llegará ni siquiera a la agenda legislativa. La Comisión de Constitución y Legislación del Senado, presidida por la legisladora nacionalista Graciela Bianchi, había aprobado el 21 de marzo por 5 votos a 9 comenzar el juicio político contra la intendenta Cosse. Esta última se perfila mientras tanto como una potencial precandidata presidencial por el Frente Amplio.
La propia Cosse ha hecho referencia al tema en las últimas horas, manifestando que espera que, “por el bien de nuestra democracia, por el buen uso de los instrumentos y por el respeto de la Constitución”, la Comisión de la Constitución recomiende el archivo del juicio político, ya que no se ha cometido ninguna violación constitucional.
Los hechos y la novelística
El recurso constitucional fue utilizado por los ediles de la oposición, quienes consideraban que la jefa comunal no respondía a los pedidos de información pública ni acudía a la Junta Departamental cuando era convocada.
El pedido de juicio político fue calificado como desmedido por dirigentes del Frente Amplio y, además, no contaría con los votos de los legisladores oficialistas, ya que para destituir a un intendente se requieren mayorías especiales.
En realidad, cuando se convocó al juicio político, la Intendencia de Montevideo ha respondido 1.601 preguntas en 459 pedidos de informes de la Junta Departamental de Montevideo.
Solamente en el año 2021 se enviaron a la IM un total de 234 pedidos de informes, los cuales fueron respondidos en su totalidad, de acuerdo a la misma administración capitalina.
Para el Frente Amplio, el pedido de juicio político era “desmedido”, y se había manifestado, de entrada, en contra, o sea que en bloque votarían en contra si llegaba al Parlamento.
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