Oposición rechazó destituir a generales ante quienes Gavazzo reconoció desapariciones y torturas

Este miércoles 15 de mayo el Plenario del Senado analizó las venias que solicitó el Ejecutivo a efectos de disponer el pase a situación de retiro obligatorio de los generales Claudio Romano, Carlos Sequeira, Alejandro Salaberry y Gustavo Fajardo por sus actuaciones en el Tribunal de Honor donde Gavazzo admitió haber sido el autor material de la desaparición del preso político Roberto Gomensoro, meses antes del golpe de Estado.

Ante el mismo Tribunal, Jorge Silveira dijo que Gavazzo además fue el responsable por la muerte de Gomensoro, y de otro detenido en el Grupo de Artillería Nº 1 (Eduardo Pérez Silveira), así como de la desaparición de María Claudia García de Gelman.

A raíz de tales declaraciones, el Ejecutivo decidió tomar acciones con respecto a los integrantes de los tribunales de Honor y Alzada y determinó cesar al comandante en Jefe del Ejército, José González, y al jefe del Estado Mayor de la Defensa, Alfredo Erramún. A la vez, requirió las venias para promover la situación de pase a retiro obligatorio de Romano, Sequeira, Salaberry y Fajardo, las cuales se analizaron este miércoles en el Senado.

Cuando las mayorías no alcanzan

Sin embargo, para aceptar el pase a retiro de los cuatro miliares se requería una mayoría especial de 3/5 de los senadores, es decir 18 votos favorables.

El resultado final de la votación, que se tomó en forma nominal, fue de 16 votos afirmativos (todos los legisladores del Frente Amplio) en 31 parlamentarios presentes, por lo que no resultó aprobada la destitución de los cuatro militares, quienes continuarán en funciones.

Durante el debate, el frenteamplista Rafael Michelini resaltó que la “impunidad reinó” hasta antes de los gobiernos del Frente Amplio.

El nacionalista Jorge Larrañaga manifestó que se estaba ante tal situación porque “un periodista evidenció que la actitud de Vázquez respecto a los derechos humanos ha sido prescindente”.

A su turno, el colorado Pedro Bordaberry cuestionó que el secretario de la Presidencia, Miguel Ángel Toma salió de la situación “como si no hubiera pasado nada”, en referencia a que supuestamente no habría informado a tiempo al mandatario sobre las declaraciones de los miliares.

Mientras que Mieres dijo que su voto negativo se refiere a que “el fundamento que expresó el Poder Ejecutivo se basó en hechos falsos, pero si hubiera sido fundamentado en los contenidos del fallo, entonces sí hubiese acompañado la venia de destitución”.