El Senado rechazó por mayoría una cuestión de fueros por dichos de un legislador
La Cámara de Senadores rechazó con los votos de los legisladores del Frente Amplio una cuestión de fueros y asunto político por las expresiones del senador de la Lista 711 Leonardo de León quien trató al senador Pablo Mieres (Partido Independiente) de “carroñero de la política”.
Días pasados de León dijo que iniciaría acciones legales contra Mieres por “daño moral” al denunciarlo por el uso de la tarjeta corporativa de ALUR, cuando el fiscal pidió archivar el caso.
A raíz de ello, de León remarcó que Mieres es un “gran carroñero de la política”.
Este martes 8 de mayo el senador colorado Pedro Bordaberry planteó una cuestión de fueros y asunto político.
Bordaberry rechazó las expresiones de Leonardo de León “quien amenazó con un juicio al senador Mieres, por sus opiniones, dentro de este Parlamento y con sus abogados”.
“Se está incurriendo en una conducta indigna, se están afectando los fueros del Cuerpo y violando el artículo 112 de la Constitución de la República, en el cual establece que los senadores y los representantes jamás serán responsables por los votos y opiniones que emitan durante el desempeño de sus funciones”.
No hubo amenaza
Por su parte, la senadora del Frente Amplio Daisy Tourné dijo que “no hubo amenaza explícita por parte del senador Leonardo de León, sino que fue una especulación de uno de los asesores del legislador de la Lista 711”. Agregó que “no hay razón de una cuestión de fueros porque no hay juicio presentado”.
En el mismo sentido Rafael Michelini definió de “ridículo” el planteo de Bordaberry y en un momento dijo que parecían “niñas de quince años”. También tuvo un exabrupto, cuando ya había hecho uso de la palabra, pero aún su micrófono estaba encendido.
Desde el Partido Nacional, Luis Alberto Heber cuestionó que “hubo insultos y ataques personales que dan vergüenza”.
A su turno, de León manifestó que nunca realizó “circo en la prensa” ni jamás cometió ningún “enchastre a nadie”.
Entretanto, Mires aseguró que “el uso indebido de la tarjeta corporativa de ALUR es lo que realiza un enchastre a la política”.
Aseguró que todo los hechos denunciados a la Justicia existieron y el fiscal dijo que la denuncia del Partido Independiente “no tenía falsedad».
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