Argentina podría abandonar el Acuerdo de París: ¿Un nuevo precedente?

Argentina evalúa su participación en el Acuerdo de París

El gobierno argentino, encabezado por el presidente Javier Milei, está considerando la posibilidad de retirarse del Acuerdo de París sobre el cambio climático, una decisión que tendría consecuencias internacionales significativas. Esta medida, que se encuentra en fase de evaluación, generaría un precedente mundial similar al establecido por la administración Trump en Estados Unidos. La decisión final aún no se ha tomado, pero la reevaluación de la participación argentina en el acuerdo es inminente.

El ministro de Relaciones Exteriores de Argentina, Gerardo Werthein, confirmó que el gobierno está realizando una revisión exhaustiva de sus políticas climáticas. Esta revisión abarca la participación del país en el Acuerdo de París, un tratado internacional adoptado en 2015 con el objetivo de frenar el calentamiento global. La decisión se basa en discrepancias con los lineamientos del acuerdo, planteando dudas sobre la continuidad de Argentina dentro del mismo.

La posible retirada de Argentina del Acuerdo de París generaría un impacto significativo en la política climática internacional. La decisión estaría alineada con las posturas expresadas previamente por el presidente Milei, quien ha descrito la crisis climática como una «mentira del socialismo«. Esta postura contrasta con el consenso científico sobre el calentamiento global y sus causas antropogénicas, generando preocupación a nivel global.

Rechazo a la conferencia climática COP29

Como parte de esta reevaluación, Argentina decidió retirar su delegación de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP29), que se celebra en Bakú, Azerbaiyán. La decisión de no participar en la COP29 se justificó con la necesidad de «revisar la posición» del país en materia de cambio climático. Esta ausencia en la COP29 refleja la postura crítica del gobierno argentino frente al acuerdo y sus objetivos.

El gobierno argentino argumenta discrepancias en las causas del calentamiento global, considerando que éste se debe a «ciclos naturales» y no exclusivamente a la actividad humana. Aunque no se niega la existencia del cambio climático, se cuestiona la responsabilidad atribuida a las emisiones de gases de efecto invernadero. Esta postura se contrapone a las conclusiones científicas que vinculan mayoritariamente el calentamiento global a la actividad humana.

La incertidumbre sobre la decisión final de Argentina respecto al Acuerdo de París genera preocupación. Si el país se retirara del acuerdo, se sumaría a Estados Unidos como la única nación en abandonar el tratado, creando un precedente negativo para la lucha contra el cambio climático. La posible retirada de Argentina también podría influir en las decisiones de otros países.

Argentina se aísla nuevamente en la ONU

Argentina registró su segundo voto en solitario contra una resolución de las Naciones Unidas en menos de una semana. Tras oponerse a una resolución sobre los derechos de los pueblos originarios, el país se posicionó en contra de una iniciativa para combatir la violencia contra mujeres y niñas. Esta resolución, apoyada por 170 países, contó con 13 abstenciones, dejando a Argentina como el único voto negativo. La decisión, tomada en medio de la creciente preocupación por los derechos humanos, sitúa al país en una posición aislada en el escenario internacional. Entre los países que se abstuvieron se encuentran Rusia, Irán, Corea del Norte, Nicaragua, Burundi y Malí, destacando la singularidad de la postura argentina.

El precedente de Estados Unidos

Estados Unidos, bajo la presidencia de Donald Trump, se retiró del Acuerdo de París en 2017, aunque posteriormente regresó bajo la presidencia de Joe Biden. El paralelismo entre las posiciones de Trump y Milei sobre el cambio climático es notable, generando comparaciones entre ambos líderes y sus políticas medioambientales. Esta coincidencia de posturas refuerza la incertidumbre sobre el futuro de Argentina en el Acuerdo de París.

La postura del gobierno argentino contrasta con el consenso científico internacional sobre el cambio climático y la necesidad urgente de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para evitar un aumento catastrófico de la temperatura global. El consenso científico destaca la necesidad de una acción internacional coordinada para enfrentar los desafíos del cambio climático. La decisión de Argentina podría afectar negativamente los esfuerzos internacionales para alcanzar este objetivo.

El impacto en la lucha contra el cambio climático

La posible salida de Argentina del Acuerdo de París representaría un duro golpe a la lucha global contra el cambio climático. El acuerdo establece objetivos ambiciosos para la reducción de emisiones, y la retirada de un país podría debilitar los esfuerzos internacionales para alcanzar estas metas. Este escenario podría dificultar la mitigación de los efectos del cambio climático a nivel global.

La decisión que tome Argentina sobre su participación en el Acuerdo de París tendrá implicaciones a largo plazo para el país y para la comunidad internacional. La reevaluación de las políticas climáticas se produce en un contexto global de creciente preocupación por el cambio climático y la necesidad de una acción urgente para reducir las emisiones. El futuro de la participación de Argentina en el acuerdo aún se encuentra en debate.