Las fake news de Trump y el discurso proderechos de Harris en el acalorado debate

 

En un evento que podría recalibrar la tumultuosa carrera presidencial, Kamala Harris enfrentó a Donald Trump en un debate que, para muchos observadores, fue una clase magistral de oratoria. La vicepresidenta se presentó con firmeza en el National Constitution Center de Filadelfia y de inmediato puso a Trump a la defensiva.

Fue la primera ocasión en que Harris y Trump se encontraron cara a cara desde que ella ascendió al Senado y él llegó a la Casa Blanca en 2016. Desde entonces, el historial de Harris en el Senado se ha destacado por cuestionar a funcionarios de la administración Trump, y su capacidad de debatir fue puesta a prueba nuevamente al ser compañera de fórmula de Joe Biden hace cuatro años.

Harris y su técnica de enfrentamiento

Durante los más de 90 minutos de intercambio, Harris no dejó escapar la oportunidad de presionar a Trump, especialmente en temas delicados como el aborto. Con ingenio, se burló de él por el tamaño de sus convocatorias. A lo largo del debate, el nerviosismo de Trump fue evidente, reaccionando a cada provocación de Harris.

«Donald Trump en realidad no tiene ningún plan para ustedes, porque está más interesado en defenderse a sí mismo que en cuidar de ustedes«, afirmó Harris, presentando un argumento que recordó sus días como fiscal. Incluso con la carrera al filo de la navaja y un apoyo constante a Trump a pesar de sus problemas legales, Harris logró actuar sin fisuras. El gobernador Gavin Newsom describió su actuación como una “clase magistral”.

Las estrategias de Harris y Trump

“Harris seguía mirando a la cámara, hablando de ti, hablando de mí, hablando del pueblo estadounidense», señaló Newsom. Esto contrastó con Trump, que centró su discurso en quejas y el tamaño de sus eventos multitudinarios. Los temas cruciales para el pueblo estadounidense estuvieron en el centro de su intervención, destacando las diferencias en el enfoque de gobernanza frente a Trump.

Trump, por su parte, no se comprometió a vetar una prohibición nacional del aborto durante el debate. Alegó que era una hipótesis lejana dada la actual configuración del Congreso. Además, evitó reconocer una pérdida en las elecciones pasadas o lamentar su papel en los eventos del 6 de enero de 2021.

Divergencias en políticas y enfoque

Intentando demostrar sus fortalezas, Trump redirigió muchas preguntas hacia su tema predilecto: la inmigración. Aunque afirmó vehementemente que la situación es “ridícula”, incluso sus partidarios en la sala de prensa admitieron el desempeño sólido de Harris. «Hemos escuchado muchas palabras mejor expresadas de lo habitual, lo admito, de Kamala Harris», expresó Vivek Ramaswamy.

A pesar de los intentos de Trump por imponerse, Harris logró delinear una agenda centrada en la energía y el cambio climático, eludiendo ataques sobre ser una “marxista”. Aunque algunos activistas climáticos esperaban más, valió la pena mencionar su promoción del fracking en contraste con las expectativas de representar un cambio radical hacia la energía limpia.

 

 

Trump amplificó noticias falsas racistas sobre inmigrantes haitianos

Durante el debate, Donald Trump repitió un rumor infundado sobre inmigrantes haitianos en Ohio, afirmando que estaban involucrados en el secuestro y consumo de mascotas, específicamente en Springfield. Esta declaración alarmó a muchos y continuó con un patrón de retórica incendiaria que ha caracterizado sus intervenciones públicas.

Los moderadores del debate, David Muir y Linsey Davis, actuaron con rapidez para desmentir estas afirmaciones. Destacaron que no hay pruebas que respalden estos rumores y subrayaron que las autoridades locales han desmentido tales acusaciones. Esta verificación en tiempo real provocó tensiones adicionales en el ya acalorado debate.

Las afirmaciones de Trump encontraron eco en algunos círculos políticos, incluyendo figuras como el senador de Ohio, JD Vance. No obstante, las autoridades locales han informado que no existen denuncias creíbles que respalden tales rumores. Estos comentarios alimentan estereotipos racistas y generan miedo dentro de comunidades inmigrantes ya vulnerables.