Venezuela: Juez ordena detener al opositor Edmundo González Urrutia
La oposición sostiene que González Urrutia es el ganador de las elecciones de julio, mientras que Maduro se abroquela al poder y las instancias electorales rechazan hacer públicas y verificables las actas de votación.
El pasado lunes, un juez especializado en temas de terrorismo en Venezuela ordenó la captura de Edmundo González Urrutia, quien fue el candidato de la oposición en las elecciones presidenciales del 28 de julio. Esta decisión fue tomada por el juez Edward Briceño, a raíz de una solicitud presentada por la Fiscalía General de la República.
En la solicitud del fiscal Luis Ernesto Dueñez Reyes se acusó a González Urrutia de delitos como usurpación de funciones, forjamiento de documento público, instigación a la desobediencia de las leyes, conspiración, sabotaje de sistemas y asociación. Estos cargos han generado atención y controversia tanto a nivel nacional como internacional.
Controversia electoral y resultados disputados
El Consejo Nacional Electoral (CNE) declaró a Nicolás Maduro como ganador de las elecciones del 28 de julio, sin embargo, no publicó las actas desglosadas por mesa que respaldaran dicha victoria. Este detalle ha sido central en las disputas entre el gobierno y la oposición, ya que la falta de transparencia alimenta sospechas y tensiones.
Por otro lado, la oposición asegura que los resultados fueron alterados y que, en realidad, el vencedor habría sido González Urrutia, basándose en el 80% de las actas escrutadas, según sus cálculos. La Plataforma Unitaria Democrática, de la cual forma parte Urrutia, publicó las actas en una web accesible a todos, proclamando que su candidato ganó.
Reacciones de apoyo y rechazo
Desde el anuncio de la victoria de Maduro, las protestas han tomado las calles de Venezuela, generando detenciones masivas. La oposición, liderada por figuras como María Corina Machado, ha rechazado tanto la orden de captura como las acusaciones contra González Urrutia, tildándolas de un intento de represión política por parte del gobierno.
María Corina Machado expresó en su cuenta de X que el oficialismo ha “perdido toda noción de realidad”. Según ella, estas acciones solo fortalecen la unidad y el apoyo hacia González Urrutia, tanto en Venezuela como a nivel internacional. Esta orden de captura marca un nuevo episodio en las tensiones políticas del país.
Respaldo internacional y condenas extranjeras
Diferentes gobiernos han manifestado su preocupación y condena ante esta situación. La Cancillería argentina, que previamente había reconocido la victoria de González Urrutia, emitió un comunicado calificando la orden de captura como un acto de persecución y radicalización del régimen de Maduro.
Argentina, junto con otros países como Uruguay, Chile y República Dominicana, ha criticado la intervención judicial y ha advertido sobre el carácter represivo de estas medidas. En el comunicado se resalta el contexto de violaciones de derechos humanos en medio de las protestas contra lo que denominan un “burdo fraude electoral”.
Chile, por su parte, reiteró su postura de condena “a cualquier forma de represión en contra de los opositores”, instando a que se respeten los principios democráticos. El presidente Gabriel Boric llamó a garantizar los derechos fundamentales de los venezolanos en este clima de represión política.
Tensión política y su impacto en Venezuela
Este conflicto ha incrementado las tensiones políticas en Venezuela y ha dejado al país en una situación de incertidumbre. Las acusaciones cruzadas y la falta de consenso sobre los resultados electorales han generado un ambiente volátil, afectando la estabilidad social y política.
Las protestas en las calles, las detenciones de manifestantes y el llamado internacional a respetar los derechos humanos evidencian la profundidad de la crisis actual. Mientras tanto, el futuro político de Venezuela sigue siendo impredecible, con un gobierno enraizado en el poder y una oposición que busca afirmar su legitimidad.
La orden de captura contra González Urrutia es vista como parte de una estrategia gubernamental para desmantelar la oposición, según sus críticos. Sin embargo, el gobierno de Maduro defiende sus acciones como necesarias para mantener el orden y la estabilidad en el país.
Compartí tu opinión con toda la comunidad