Presidencia de Brasil: «Investigaciones contra Temer buscan impedir su candidatura»

 

El pasado sábado el juez del Supremo Tribunal Federal de Brasil, Luis Roberto Barroso, aceptó una petición presentada por la Fiscalía de ese país para revocar trece mandatos de prisión temporal al considerar que los arrestos ya cumplieron su objetivo legal.

Entre los detenidos se encuentran el abogado José Yunes, exasesor de la Presidencia y el coronel retirado Joao Baptista Lima, conocidos amigos del presidente Michel Temer, así como el exministro Wagner Rossi.

Los tres fueron detenidos el jueves por autorización del Supremo con el fin de recabar pruebas en una investigación sobre la firma de un decreto portuario sancionado en 2017 por Temer.

Las autoridades indagan si el decreto que benefició a empresas del sector portuario fue sancionado por el presidente de Brasil a cambio de sobornos para financiar las campañas de su partido, el Movimiento Democrático Brasileño (MDB).

José Yunes fue asesor de Temer hasta finales de 2016, cuando se vio obligado a dejar el cargo al verse salpicado por la confesión de un exejecutivo de la constructora Odebrecht que el acusó de ser intermediario de sobornos dirigidos al MDB.

El coronel Lima por su parte es amigo personal del presidente desde hace décadas y también ha sido apuntado por delatores como un puente en la entrega de coimas.

«Impedir la candidatura de Temer»

Desde la Presidencia consideraron que «las investigaciones por corrupción contra el presidente de Brasil, Michel Temer, buscan retirarle de la vida pública e impedir que sea candidato a las elecciones de octubre».

«El atropello de los hechos y de la verdad busca retirar al presidente de la vida pública, impedirle continuar prestando relevantes servicios al país», afirma el comunicado emitido un día después de la detención de los allegados del mandatario.

La Fiscalía, según varios analistas, podría estar cerca de presentar una tercera denuncia por corrupción contra el mandatario. Temer se convirtió el año pasado en el primer presidente de la historia de Brasil en ser acusado formalmente durante el cargo, aunque ambas denuncias fueron bloqueadas en la Cámara de Diputados y seguirán su curso una vez que Temer finalice su mandato.

Para la defensa del presidente todas las acusaciones son una «farsa».

«Sin tener hechos relevantes que investigar, autoridades intentan crear narrativas que generen nuevas acusaciones (…) Intentan una vez más destruir la reputación del presidente Michel Temer. Usan métodos totalitarios», expresa el texto de Presidencia que argumenta en primer lugar la inocencia del mandatario en esta trama que investiga si la empresa Rodrimar pagó propinas para aumentar la duración de sus concesiones en el Puerto de Santos (sureste).

Según el comunicado la intención de las nuevas acusaciones es acabar con las intenciones de Temer de presentarse a las elecciones de octubre.

«Bastó la simple mención de la posible candidatura para que fuerzas oscuras surgieran para tejer nuevas tramas sobre viejos enredos maledicientes», afirma el texto que denuncia que «en el Brasil del siglo XXI, algunos quieren impedir la candidatura. Se busca impedir al pueblo la libre elección».

Recientemente Temer adelantó en una entrevista su intención de ser candidato a las elecciones, a pesar de su baja popularidad y de haber asegurado en varias ocasiones que no sería candidato.