Cuba celebró sus primeras elecciones municipales sin Fidel Castro

La Comisión Electoral Nacional de Cuba (CEN) informó que 7.247.590 cubanos ejercieron su derecho al voto este domingo, lo que significa el 82,05% de los ciudadanos de la isla, para elegir a los delegados municipales a la Asamblea Nacional del Poder Popular.

Las elecciones de ayer fueron la primera etapa de los comicios generales 2017-2018, en las que saldrán electos 12.515 delegados en igual número de circunscripciones, quienes integrarán las 168 asambleas municipales que existen en Cuba.

El 3 de diciembre se realizará la segunda vuelta en las circunscripciones donde ninguno de los dos candidatos obtenga más del 50 por ciento de las boletas válidas emitidas.

De entre los delegados elegidos este domingo saldrán los candidatos a diputado de la Asamblea Nacional para la segunda etapa de las elecciones generales que se celebrará en los próximos meses.

El nuevo Parlamento que salga de esa elección será el encargado de ratificar el próximo 24 de febrero al nuevo presidente de Cuba, a propuesta del Consejo de Estado, lo que supondrá un recambio generacional en el poder.

Continuación de la Revolución

El primer vicepresidente Miguel Díaz-Canel, previsible sucesor de Raúl Castro, apostó ayer por la continuidad del socialismo. “Yo no concibo las rupturas en nuestro país, creo que ante todo tiene que haber continuidad”, dijo a la prensa tras votar.
Díaz-Canel fue designado por el propio Raúl Castro como su “número dos” en 2013, y se perfila para suceder al mandatario, cuando éste deje la Presidencia en febrero de 2018, a los 86 años, como ha prometido.

De todas maneras no hizo referencia a esa posibilidad pero si adelantó que en el futuro “habrá presidentes siempre defendiendo la Revolución y serán compañeros que saldrán del pueblo”.

Y afirmó que las elecciones del domingo son en defensa de la Revolución y servirán para enviar “un mensaje a los que quieren hacer cambiar o imponer condiciones de que este es un pueblo que no se va a doblegar ni por huracanes ni por presiones externas», en referencia a la nueva arremetida de Estados Unidos contra la isla tras la llegada de Donald Trump.