Lula y Dilma desde Minas Gerais: «Están vendiendo nuestro país»

El expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, inició una nueva caravana por el país de cara a las próximas elecciones que tendrán lugar en 2018.

“Están vendiendo nuestro país», alertó Lula ante miles de manifestantes congregados en el estado Minas Gerais (sudeste) en un acto de defensa de la democracia y la soberanía nacional.

«Tenemos que hacer un referendo revocatorio para cambiar lo que hicieron”, agregó en referencia a las políticas neoliberales impulsadas por el Gobierno de Michel Temer, al cual acusó de estar provocando la desgracia y la quiebra del país.

El exmandatario se refirió a su aspiración presidencial y aseguró ante que “si no quieren que sea candidato, vayan a las urnas y voten en contra», pero que «no inventen artimañas».

Lula también se refirió a la importancia que en política tiene la palabra credibilidad y recordó que perdió tres elecciones presidenciales consecutivas y siempre pensó que debía prepararse mejor para «poder tocar la conciencia, el alma y el corazón de la nación brasileña».

«Nosotros no queremos seguir exportando soya y mineral de hierro; queremos exportar conocimientos, por eso vamos a colocar a millones de pobres en las escuelas», expresó.

También recordó que el próximo viernes cumplirá 72 años pero advirtió que se está preparando para la contienda en las urnas. «Todos los días hago dos horas de ejercicios físicos y voy a regresar con la energía un joven de 30. Ellos no saben lo que es un pernambucano con la energía de los mineros; no saben lo que va a suceder en este país», afirmó.

Respecto a las acciones judiciales abiertas en su contra y a la condena que puede imposibilitarlo de ser candidato presidencial afirmó que luchará hasta el último día de su vida para probar que la Policía Federal y el Ministerio Público mintieron y que el juez federal Sergio Moro lo condenó injustamente.

La llamada Caravana de la Esperanza por tierras mineras es la segunda gira que inicia Lula en este 2017, se extenderá hasta el día 30 y abarcará siete regiones y 14 ciudades.

«Querían implementar un programa que fue derrotado cuatro veces en las urnas»

En su primer acto Lula se mostró con Dilma Rousseff, destituida del poder en 2016, quien resaltó la importancia de esta caravana, que busca sostener un intercambio con la ciudadanía sobre lo que está sucediendo en el país.

Dilma aludió al golpe parlamentario que denuncia fue víctima el año pasado y señaló que no fue dado solo por maldad, sino para implementar un programa que fue derrotado cuatro veces en las urnas y retirar todos los derechos conquistados en los años de gobierno petista por los trabajadores y para entregar al capital foráneo las riquezas y la soberanía brasileñas.

«Quieren vender nuestras fértiles tierras y el pré-sal (las mayores reservas de petróleo en aguas profundas), que era el pasaporte para el futuro de Brasil al poder garantizar -con sus recursos- una educación de calidad y transformarnos en una nación desarrollada», lamentó la ex mandataria.