Juristas brasileños lanzaron un libro que contesta a la sentencia de Moro contra Lula

El pasado viernes se realizó el lanzamiento en la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ) del libro ‘Comentarios a una sentencia anunciada – el proceso Lula», firmado por 122 juristas brasileños de diversas esferas ideológicas que analizaron la sentencia de Sérgio Moro que condena al ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva a nueve años y medio de prisión. Los expertos señalan que hubo arbitrariedades y equívocos jurídicos en la condena.

Este lunes el libro se presentará en Sao Paulo.

“No es un libro a favor o en contra otra de una persona, sino una defensa del ‘justo derecho’ de lo que entendemos como una sentencia frágil, basada en la excepcionalidad y en la falta de pruebas”, explicó a Público Carol Proner, abogada, profesora de Derecho en la universidad Pontifica Católica de Rio de Janeiro y una de las organizadoras de la publicación.

Proner explicó que la idea del libro surgió tras los comentarios de diversos abogados brasileños en un grupo de WhatsApp luego de conocer la condena en primera instancia de Moro. Según relató la abogada al medio español “cada uno señalaba un error, estábamos impresionados por el tipo de argumentos del juez, por eso decidimos escribir un libro que analizara con claridad el disparate judicial que estaba en nuestras manos”. Así sumaron a más de 122 juristas que se repartieron los temas para crear este libro de 101 capítulos.

La sentencia de Sérgio Moro que condena a Lula por corrupción y lavado de dinero se basa en que el ex presidente habría ayudado a la constructora brasileña OAS a firmar tres contratos con la estatal Petrobrás a cambio de 1,1 millones de dólares, que fue entregado en un apartamento triplex en la zona costera de Guarujá.

Los juristas que lanzaron el libro señalan que el principal problema de esa sentencia es que no hay pruebas que sustenten las acusaciones: «No hay materialidad del crimen”, explicó Proner.

Por ahora Moro no obtuvo ningún documento en el que apareciera el ex presidente como dueño del inmueble, ni tampoco pruebas de que Lula hubiera intercedido en esos contratos con la constructora y se hubiera llevado algo a cambio.

La acusación se centra en la confesión del empresario de OAS, Leo Pinheiro, preso desde hace un año y medio en Curitiba, que a través de una delación premiada por el juez Moro para rebajar 3 años de penitenciariá, dijo que el apartamento a pesar de no estar a nombre del ex presidente le pertenecería.

Para los juristas ese es uno de los puntos “más frágiles de la sentencia”, ya que mientras el magistrado da por válido ese testimonio, no aceptó investigar los otros 72 testigos que aportó la defensa que refuerzan la idea de que Lula no era dueño del inmueble.

“Es impensable que una sentencia de un crimen tan grave como el de corrupción y lavado de dinero se base en un único testigo que habla después de haber llegado a un trato para rebajar su pena y que se ignore por completo a todos aquellos que dicen lo contrario. Una confesión por delación premiada jamás podría usarse como única prueba, eso lo saben todos mis alumnos”, agregó Proner en su conversación con Público.

El libro repasa todas las etapas de la investigación de Moro contra Lula y las acciones llevadas a cabo por el magistrado durante ese tiempo.

Lula da Silva participó de la presentación del libro en Río de Janeiro y aseguró que “van a tener que trabajar mucho para impedir que vuelva a ser candidato presidencia”. A su vez adelantó que en caso de ganar las elecciones una de sus principales tareas será llevar adelante la regulación de los medios de comunicación.

“Lava Jato está funcionando como un partido político”

Por otro lado, pero en el mismo sentido, Lula participó de una sesión pelnaria de la Central Única dos Trabalhadores (CUT) en Río de Janeiro, y se refirió a la selectividad de la operación anticorrupción Lava Jato, de la cual dijo que está funcionando como un partido político.

“Necesitamos tener conciencia de lo que está pasando en Brasil. El objetivo de las reformas (impulsadas por el gobierno de Michel Temer) es destruir aquello que conquistamos”, dijo y afirmó que quieren destruir el Partido de los Trabajadores (PT) “para evitar que Lula vuelva en la elección de 2018”.

El ex mandatario reiteró su pedido a la justicia y al Ministerio Público a que presenten pruebas de que él es en realidad el dueño de un apartamento en Guarujá.

“Yo probé mi inocencia y quiero que comprueben que tengo un real que no me pertenece”, remarcó antes de afirmar que el “Lava Jato está funcionando como un partido político”.