Putin compara a Comey con Snowden y le ofrece asilo en Rusia si llega a ser perseguido en EE.UU.

Durante la 15ª edición de la ‘línea directa’ un programa transmitido por la televisión rusa en el que el presidente ruso, Vladimir Putin dialoga con ciudadanos de todo el país, el mandatario se refirió a las nuevas sanciones adoptadas contra Rusia por parte del Senado estadounidense y consideró que son el último episodio de la política de «contención» de Washington respecto a Moscú.

El nuevo proyecto de sanciones aprobado el miércoles por el Senado impediría al presidente Trump rebajar de forma unilateral la presión sobre Moscú. Para el mandatario ruso «se trata, evidentemente, de una nueva prueba de la continuación de la lucha política internas en EE.UU, y consideró que «a pesar de todo, que esto no tiene ningún fundamento». En ese sentido aseguró que «si no hubiera sido por Crimea, habrían inventado otra cosa para su política de contención de Rusia».

Putin hizo referencia al caso del ex director del FBI James Comey, quien la semana pasada declaró ante el Senado que antes de ser despedido Donald Trump le pidió que dejara de investigar las posibles relaciones entre el exasesor de seguridad nacional, Michael Flynn y el Gobierno de Rusia.

Putin se mostró conforme de que Comey dijera «que no tiene pruebas» sobre la interferencia rusa en las elecciones estadounidenses y reiteró que Rusia no se dedica a ninguna «actividad clandestina».

«¿En qué difiere el director del FBI del señor Snowden?»

A su vez el mandatario ruso reconoció respecto a la declaración de Comey que le parece un poco extraño «que un jefe de los servicios especiales divulgue la conversación con el presidente».

Putin sostuvo que Comey grabó su conversación con el presidente de EE.UU., Donald Trump, y luego traspasó la grabación a los medios de comunicación a través de un amigo. «Esto ya suena muy raro, cuando el jefe de un servicio de inteligencia graba la conversación con el Comandante Supremo y luego la pasa a los medios a través de su amigo», expresó.

Por ese motivo el líder ruso hizo una comparación de Comey con el exanalista de la NSA, Edward Snowden, quien se encuentra refugiado en Rusia tras haber filtrado a la prensa información clasificada sobre los programas de vigilancia masiva empleados por las agencias de inteligencia de EE.UU. y dijo: «¿Entonces, en qué difiere el director del FBI del señor Snowden? En este caso, no es jefe del servicio de inteligencia, sino un defensor de derechos que defiende cierta postura», expresó.

En ese sentido aseguró que si el exdirector del FBI se enfrenta a algún tipo de persecución por esta situación, podrá contar con un refugio en Moscú. «Estaremos dispuestos a otorgarle asilo político en Rusia a él también. Tiene que saberlo», dijo Putin.

En su testimonio ante el Comité de Inteligencia del Senado, Comey detalló que conversó con Trump un total de nueve veces desde que el magnate asumió la presidencia, tres en persona y seis por teléfono. El extitular del FBI dijo que el mandatario le pidió «lealtad» y le dio a entender que de esa lealtad dependería su cargo. A su vez dijo que el magante le sugirió que «olvidara» la investigación sobre los contactos de Flynn con Rusia una vez que este presentó su renuncia.

Comey explicó que decidió llevar un registro escrito detallado de cada una de las conversaciones con el fin de «defender no solo a mi persona, sino también al FBI y nuestra integridad» ante una situación como la que atraviesa ahora. Por su parte Trump había amenazado con divulgar las grabaciones de las conversaciones. Consultado sobre esa posibilidad en el Senado, Comey dijo que desconocía si Trump tenía realmente grabaciones de sus diálogos, pero afirmó «espero que existan, yo daré mi consentimiento para que sean reveladas» y agregó: «el presidente seguramente sabe si me grabó, y si lo hizo, mis sentimientos no han sido heridos».

Concretamente sobre la supuesta influencia rusa en la campaña de EEUU, Putin reiteró su cuestionamiento y dijo: «¿acaso no es una influencia en nuestras mentes la propaganda de EEUU?», al tiempo que instó a la audiencia a observar como «si toman un mapa, en cualquier país del mundo verán en todos lados intereses estadounidenses». Para el presidente ruso, la influencia rusa en la campaña electoral no fue mayor que la de EEUU en comicios rusos.