Corte Suprema de EE.UU. revocó fallo Roe v. Wade que protegía el derecho al aborto
El máximo tribunal federal estadounidense, de mayoría ultraconservadora, eliminó así la protección constitucional a la interrupción voluntaria del embarazo. Se espera que decenas de estados conservadores disparen legislaciones “gatillo” para ilegalizar este derecho.
La Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos anuló este jueves el histórico fallo Roe v. Wade, que protegía con estatus constitucional el derecho al aborto, dejando ahora en poder de cada estado la potestad de establecer legislaciones que lo prohiban o permitan.
Se espera que decenas de estados, gobernados por el Partido Republicano y abiertamente conservadores, disparen sus legislaciones “gatillo” para prohibir o restringir mucho el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo.
Los integrantes del alto tribunal votaron siguiendo sus lineamientos ideológicos: 6 a favor y 3 en contra para mantener la prohibición en el estado de Misisipi a interrumpir el aborto más allá de las 15 semanas, y 5 contra 4 para anular el fallo Roe v Wade, con el derecho constitucional que este precedente jurídico instauró.
Los jueces Clarence Thomas, Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Amy Coney se unieron a Alito en el voto mayoritario. El presidente de la Corte, John Roberts, dijo que habría defendido la ley de Mississippi, pero no llegó a anular directamente Roe, según publico Bloomberg.
Retroceso en derechos
El impacto de este cambio va a ser transformador, en un vuelto hacia la derecha conservadora que está viviendo la potencia norteamericana desde el paso de Donald Trump por la Casa Blanca.
26 estados ya adelantaron que van a prohibir o probablemente prohíban los abortos en, prácticamente, todos los casos, de acuerdo a un análisis del Instituto Guttmacher, una organización que estudia y defiende el derecho a aborto en EE.UU.
Están listas 13 leyes de activación o gatillo, que se activarán en las próximas horas o días.
El fallo dice que la Constitución de los Estados Unidos no “no otorga” este derecho y devuelve el poder de legislar “al pueblo (…) y sus representantes electos”.
Como efecto dominó, también revocó el fallo del caso “Planned Parenthood v. Casey”, de 1992, que reafirmó en su momento la protección a la IVE, pero permitía a los estados establecer regulaciones sobre los procesos.
Los jueces conservadores dicen que Roe v. Wade fue “ofensivamente incorrecto” y que “colisionaba” con la Constitución.
Los tres jueces progresistas del Supremo votaron, como era de esperarse, en contra de esta decisión.
“Con pena para este tribunal, pero sobre todo para las millones de mujeres estadounidenses que han perdido hoy un derecho fundamental constitucional, disentimos”, señalaron en la opinión contraria que han firmado conjuntamente Stephen Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan.
Algunos estados ya habían adelantado que el aborto se iba a mantener legal, como es el caso del cinturón progresista de la costa oeste, conformado por los tres estados California, Oregon y Washington. El gobernador californiano, Gavin Newson, dijo que “la Corte Suprema ha eliminado las libertades y ha permitido que otros estados las reemplacen con el nacimiento obligatorio. California se ha unido a Washington y Oregon para formar la ofensiva de la Costa Oeste y proteger la libertad reproductiva en nuestros estados”, dijo el demócrata en un comunicado difundido además por redes sociales.
Situación parecida se está dando en la ciudad de Nueva York: el alcalde Eric Adams ofreció la ciudad como un refugio seguro para las estadounidenses que buscan abortos después de la reversión de Roe v. Wade. “Para aquellas que buscan abortos en todo el país: sepan que son bienvenidas aquí, y que vamos a asegurarnos de hacer todo esfuerzo posible para asegurar que los servicios reproductivos estén disponibles y sean accesibles”, expresó la oficina de Adams en un comunicado.
La era de la criminalización
En algunos de los estados donde el aborto ha sido o pronto será prohibido tras la revocación, cualquier pérdida de embarazo, más allá de ciertas circunstancias permitidas pero altamente limitadas, ahora puede investigarse potencialmente como un delito.
Historiales de búsqueda, historiales de navegación, mensajes de texto, datos de ubicación, datos de pago, información de aplicaciones de seguimiento de períodos menstruales: estas son solo algunas de las instancias que la Justicia de estos estados podrá usar para juzgar penalmente por asesinato a una mujer que sufrido una interrupción del embarazo, ya sea accidental o intencionalmente.
*Noticia en desarrollo.
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