UEFA duplica el premio de la Euro 2022 femenina, pero aún es menos del 5% de lo que ganan los hombres

El fondo de los premios para las finales del Campeonato Europeo Femenino de 2022, o Euro 2020, que se llevará a cabo en Inglaterra, ha sido duplicado hasta alcanzar los 16 millones de euros, pero aún es solamente el 4,3% de lo que ganan los equipos en la versión masculina del torneo.

La UEFA dijo el jueves que ha ordenado el aumento del premio para la Euro femenina de 8 a 16 millones de euros. Sin embargo, los 24 equipos masculinos que compitieron en el verano boreal de 2021 en Italia se repartirán 371 millones de euros, 23,2 veces más que el premio femenino.

La decisión de duplicar el premio femenino sucede después de una reunión del Comité Ejecutivo de la UEFA llevado a cabo este miércoles en Chisinau, Moldavia. El organismo rector del fútbol europeo agregó que los detalles de la distribución financiera estarán disponibles pronto.

Adicionalmente, la UEFA aprobó por primera vez en su historia la introducción de un programa de beneficios de 4,5 millones de euros para recompensar a clubes europeos que cedan jugadoras en la fase final de la Euro femenina, por su contribución al éxito del evento.

Una brecha de género gigantesca

La industria global del fútbol tiene una brecha de género abismal, a pesar de que es una de las industrias más lucrativas del mundo con ingresos que ascienden a los US$500 mil millones anuales.

Según el Banco Interamericano de Desarrollo y de la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales, 49% de las jugadoras profesionales y de primeras divisiones del fútbol femenino no reciben ni un dólar de salario mensual, y 87% culmina su carrera a los 25 años ante la ausencia de perspectivas a futuro y la baja o nula remuneración.

Ni siquiera las mejores del mundo llegan a tener ingresos si acaso parecidos a los de los varones: mientras que Leonel Messi ganaba en el Barcelona unos 130 millones de euros por año, Ada Hegerberg -la mejor del mundo según la propia FIFFA- apenas recibe unos 400.000 euros anuales.

Esta situación no es nueva. En 2012, el Santos de Brasil eliminó la rama femenina, solo para cubrir el sueldo de Neymar y retrasar su venta al FC Barcelona. Pero los ejemplos son aún más sencillos: en los equipos de mujeres hay selecciones que debían utilizar las camisetas antiguas del equipo varonil, y cada jugadora debía pagarse su pasaje a los torneos por falta de presupuesto.