El Femicidio en Francia
El femicidio, entendido como el asesinato de una mujer motivado en el sexismo y la misoginia, es un tipo de crimen que ha estado presente en las diferentes etapas del proceso histórico social y en las diversas formas organizativas que conocemos; que se realiza con especial violencia y crueldad, y, que se manifiesta en el mundo entero con independencia del nivel educativo, la clase social y la pertenencia étnico-racial.
No obstante, pese a que prevalece en el imaginario colectivo la idea de que el femicidio es un fenómeno exclusivamente latinoamericano, la realidad es que este también encuentra importantes índices de ocurrencia en el continente Europeo. Según el informe “Administrative data collection on rape, femicide and intimate partner violence in EU Member States” publicado en el año 2017 por The European Institute for Gender Equality (EIGE), ningún Estado miembro de la Unión Europea (UE) tiene una definición legal de femicidio; sin embargo, en dicha región el concepto se entiende generalmente como el asesinato de una mujer en el contexto de la violencia de pareja.
De acuerdo a ello, 14 de los Estados miembros de la UE registran información sobre los asesinatos de mujeres por parte de sus parejas íntimas, sin embargo, la falta de indicadores cuantitativos comparables, según el artículo “Féminicide en Europe: une comparaison entre différents pays” escrito por Marzia Bona y Alberto Burba, contribuyó a que el femicidio se excluyera de los criterios tomados en cuenta al formular el Índice de igualdad de género 2017, presentado en el simposio anual sobre derechos fundamentales en la UE.
Estas diferencias existentes en lo que refiere la recolección y publicación de estadísticas por los diferentes países de la Unión Europea, aunado a la prevalencia de una perspectiva pareja céntrica en la sistematización y tratamiento de los femicidio, invisibiliza los múltiples casos de asesinatos de mujeres perpetrados por hombres motivados por el sexismo y la misoginia fuera de la relación conyugal; por ejemplo, los femicidios cometidos en el contexto los crímenes de honor o por incesto (aquellos perpetrados por padres, tíos, primos, hermanos o hijos de consanguinidad, afinidad o adopción para reafirmar su autoridad o encubrir la violencia incestuosa); la muerte de una mujer por parte de un conocido o desconocido en el contexto del acoso sexual, producto de violaciones, prostitución, turismo sexual, trata o esclavitud.
En el caso específico de Francia, la Delegación de Victimas del Ministerio del Interior, en articulación con la Dirección General de la Policía Nacional y de la Gendarmería Nacional, realiza anualmente un estudio para cuantificar y describir los homicidios perpetrados en el seno de la pareja o expareja en Francia. Según estos informes denominados “Estudio nacional sobre las muertes violentas en el seno de la pareja” han ocurrido 135 feminicidios en el año 2006, 166 en 2007, 156 en 2008, 139 en 2009, 146 en 2010, 121 casos en 2011, 147 en 2012, 121 en el 2013, 118 en 2014, 115 en 2015, 1009 en 2016, y 109 femicidios en el año 2017 (último disponible). Es decir, entre los años 2006 y 2017 han sido perpetrados en Francia 1582 femicidios.
De acuerdo a estas estadísticas oficiales y disponibles es posible verificar que los femicidios perpetrados en el contexto de la relación conyugal han disminuido en Francia durante los últimos años, sin embargo, estas cifras podrían ser más elevadas debido a que se desconoce cuántos femicidios se han cometido fuera del contexto de la relación de pareja y, si estos también han disminuido progresivamente. Además, esta problemática aún parece encontrarse lejos de su erradicación pues, según el colectivo feminista “Féminicides par compagnons ou ex” -que desde 2016 hace seguimiento en la prensa a los casos de femicidio-, durante el año 2018 se registraron 120 femicidios, y hasta el 20 de junio de 2019 se han perpetrado 67 femicidios en la República francesa, situación ante la cual el gobierno se mantiene indiferente.
Te recomendamos
El caso de Gisèle Pelicot: Un testimonio de resistencia y superación
Gisèle Pelicot revela su batalla en el tribunal, enfrentándose a su pasado tras años de abuso. Su historia se convierte en un símbolo de valentía y resiliencia que ha empoderado a millones de mujeres en el mundo
Compartí tu opinión con toda la comunidad