Todo lo que todavía no pueden hacer las mujeres en Arabia Saudita
A partir de 2018 las mujeres podrán conducir en Arabia Saudita pero todavía están encadenadas al sistema de tutela que las obliga a solicitar la autorización de un miembro masculino de su familia para realizar gestiones de la vida cotidiana, entre otras restricciones.
La semana pasada se dio a concer que el rey Salman de Arabia Saudita emitió un decreto para que finalmente las mujeres puedan conducir sus automóviles en 2018.
La información significa un gran avance para el género femenino en un país donde los derechos de las mujeres siguen siendo muy vulnerados, pero aún resta mucho para poder hablar de igualdad en ese territorio.
Arabia Saudita en uno de los países de Oriente Medio con mayores desigualdades entre hombres y mujeres.
Según el Índice Global sobre Desigualdad de Género del Foro Económico Mundial de 2016, solo es superado por dos países en guerra: Yemen y Siria.
Algunas de las prohibiciones todavía vigentes:
En Arabia Saudita las mujeres tienen tutor y están obligadas a solicitar la autorización de un miembro masculino de su familia para realizar gestiones de la vida cotidiana, como someterse a una intervención quirúrgica, abrir una cuenta en el banco, tener trabajos remunerados, recibir educación superior, casarse o viajar al exterior. Los tutores pueden llegar a ser incluso hombres menores que ellas, hasta hijos o sobrinos.
Las mujeres tampoco puden alternar con otros hombres que no sean familiares y pueden llegar a ser enviadas a prisión si se considera que han violeado esa normativa debido a que existen algunas excepciones para hospitales, bancos y escuelas médicas.. Una vez cumplida la condena necsitan la autorización de su tutor masculino para quedar en libertad, si no pasan a quedar a cargo del Estado.
Este año el rey Salmán ordenó una revisión de las leyes que prohíben a las mujeres para realizar un trámite administrativo u otro procedimiento público sin el permiso de un tutor masculino que puede ser un pariente o cónyuge, pero siempre dentro de los límites fijados por la sharia (ley islámica).
Tras el decreto del rey la administración ya no tiene necesidad del permiso de un tutor para que las mujeres puedan trabajar, sin embargo los empleadores continúan solicitándolo.
En relación al matrimonio las mujeres de Arabia Saudita tienen prohibido -al igual que en la mayoría de los países árabes- casarse con hombres que no sean musulmanes. Tampocó una mujer sunita no puede contraer matrimonio con un «hombre chiita o comunista (ateo)», según la decisión del Comité Permanente para las investigaciones islámicas y la emisión de fatuas.
Deespués de un divorcio las mujeres tampoco pueden quedarse con la custodia de los hijos. Si los niños tienen 7 años o más y las niñas nueve, es decir, cuando ya la etapa más demandante de la crianza ha pasado, las mujeres no tienen derecho a tener la custodia de sus hijos, después de una separación, lo que hace más difícil para ellas atreverse, siquiera, a hablar de divorcio.
Las mujeres sauditas tampoco pueden presentarse en público sin vestir la tradicional abaya, la negra vestimenta está hecha para proteger la modestia de las mujeres en público.
Te recomendamos
El caso de Gisèle Pelicot: Un testimonio de resistencia y superación
Gisèle Pelicot revela su batalla en el tribunal, enfrentándose a su pasado tras años de abuso. Su historia se convierte en un símbolo de valentía y resiliencia que ha empoderado a millones de mujeres en el mundo
Compartí tu opinión con toda la comunidad