Dietas basadas en plantas: Cómo reducir tu huella de carbono
Un estudio realizado por la Universidad de Oxford en 2018, encontró que las dietas basadas en plantas tienen un impacto ambiental significativamente menor que las dietas que incluyen carne y productos lácteos.
El estudio, que fue publicado en la revista Nature Food, analizó el impacto de las dietas en una serie de factores ambientales, incluidos los gases de efecto invernadero, el uso del agua, la pérdida de biodiversidad y la contaminación del aire.
Los resultados mostraron que las dietas basadas en plantas emiten un 73% menos de gases de efecto invernadero, utilizan un 76% menos de agua, generan un 60% menos de residuos y contribuyen a la pérdida de biodiversidad en un 83% menos que las dietas que incluyen carne y productos lácteos.
La investigación también encontró que las dietas basadas en plantas pueden ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas, como las enfermedades cardíacas, la diabetes y el cáncer.
Los autores del estudio concluyeron que las dietas basadas en plantas tienen el potencial de contribuir a la sostenibilidad del planeta y a mejorar la salud humana.
Algunos de los beneficios ambientales específicos de las dietas basadas en plantas incluyen:
- Reducen las emisiones de gases de efecto invernadero: La producción de carne y productos lácteos es un importante contribuyente a las emisiones de gases de efecto invernadero, que son la principal causa del cambio climático.
- Reducen el uso del agua: La producción de carne y productos lácteos requiere una gran cantidad de agua, mientras que las plantas son mucho más eficientes en el uso del agua.
- Reducen la pérdida de biodiversidad: La producción de carne y productos lácteos requiere grandes extensiones de tierra, lo que puede conducir a la pérdida de hábitats naturales.
- Reducen la contaminación del aire: La producción de carne y productos lácteos puede generar contaminación del aire, que puede tener un impacto negativo en la salud humana y el medio ambiente.
Los resultados del estudio de la Universidad de Oxford proporcionan un fuerte argumento a favor de la adopción de dietas basadas en plantas. Estas dietas tienen el potencial de contribuir a la sostenibilidad del planeta y a mejorar la salud humana.
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