Fracasa ruta Montevideo-Buenos Aires de JetSmart: afirman que la empresa quería $100.000 de subsidio
La low cost chilena JetSmart ha decidido cesar operaciones en la ruta Montevideo-Buenos Aires desde el 1 de octubre por falta de rentabilidad y la negativa del gobierno a darles un subsidio.
La aerolínea chilena JetSmart ha decidido interrumpir su servicio en la ruta Montevideo-Buenos Aires a partir del primero de octubre, una decisión que ha sorprendido a las autoridades uruguayas tras solo cuatro meses de operación. El anuncio fue recibido con descontento, resaltando la expectativa inicial que generó el lanzamiento de la ruta. Durante la inauguración, el gobierno uruguayo celebró el incremento de la conectividad y la competencia en el sector aéreo, que se tradujo en una mayor accesibilidad para los viajeros.
La cancelación del vuelo se debe a la falta de viabilidad económica de la ruta, donde se alegó que la compañía no logró cumplir con sus expectativas financieras. “Fue una sorpresa desagradable”, comentó el canciller Omar Paganini al referirse a la situación, evidenciando la decepción del gobierno ante la marcha de una iniciativa que prometía fortalecer los lazos aéreos entre Uruguay y Argentina.
Durante su breve operación, JetSmart mantenía dos frecuencias diarias, intentando asegurar su presencia en un mercado que había mostrado signos de dinamismo. Sin embargo, las expectativas no se alinearon con la realidad operativa, llevando a la compañía a solicitar un subsidio mensual de US$ 100 mil para poder equilibrar su déficit.
El subsidio rechazado y la competencia
Fuentes oficiales revelaron que la solicitud de JetSmart fue rechazada por el Ministerio de Turismo de Uruguay, que consideró la cifra como excesiva. “No le cerraban los números”, indicaron fuentes del entorno gubernamental, lo que genera un contexto complicado para la aerolínea que ya había manifestado previamente sus dificultades. La situación se agravó con la competencia de Aerolíneas Argentinas, que ajustó sus tarifas para mantener la demanda de pasajes.
El CEO de JetSmart, Estuardo Ortiz, se comunicó con Carlos Enciso, embajador de Uruguay en Argentina, destacando que, a pesar de sus esfuerzos, no contaron con “un régimen de promoción específico ni con incentivos suficientes”. Esta situación deja entrever el desafío que enfrenta la low cost chilena para adaptarse a un entorno donde la sostenibilidad de las rutas aéreas se ve amenazada por diversas variables, tanto internas como externas.
Entre las cuestiones que la aerolínea planteó también se encontraba la idoneidad de los horarios asignados inicialmente. En su comunicación oficial, Ortiz reconoció que JetSmart había experimentado “condiciones que no contribuyen a la sostenibilidad de la operación”, lo que refuerza las dificultades que enfrentan las aerolíneas al intentar establecer rutas en mercados altamente competitivos.
Perspectivas y comunicación futura
En su análisis de la situación, JetSmart subrayó que anticipaba transportar alrededor de 127.000 pasajeros durante su primer año de operación en esta ruta. Sin embargo, las condiciones del mercado indicaron que la demanda no se mantuvo como se esperaba, haciendo que la aerolínea reconsiderara su estrategia. La compañía también mencionó la alta carga impositiva y la competencia con otros medios de transporte como factores influyentes en la poca viabilidad de la ruta.
Sin embargo, las autoridades uruguayas mantuvieron una postura diferente respecto al desempeño de la ruta. Enciso expresó que la conexión Montevideo-Buenos Aires había mostrado un “rendimiento acorde a las expectativas”, señalando que había perspectivas optimistas en cuanto a su futuro. Ante la decisión de JetSmart, el embajador mencionó su “profunda preocupación”, buscando abrir un “canal de comunicación” para discutir posibles alternativas que pudieran revertir la situación.
A pesar de las inquietudes manifestadas por las autoridades uruguayas, Ortiz se mantuvo en contacto en busca de alternativas, aunque las posibilidades de un subsidio lucen escasas dada la postura del gobierno, que ha declarado contar con limitaciones económicas para auxilios a compañías privadas.
JetSmart comunicó que su decisión es parte de prácticas comúnmente observadas dentro del sector aéreo, donde la activación y desactivación de rutas dependen enteramente de factores estacionales y de demanda específica. En ocasiones, esto puede llevar a la suspensión temporal o a la cancelación definitiva de ciertos trayectos cuando la viabilidad se vuelve insostenible.
Compartí tu opinión con toda la comunidad