Jerarcas de ANCAP y UTE empiezan a hablar de fusionar ambas empresas: ¿Es viable?

La fusión entre la Administración Nacional de Combustibles, Alcohol y Portland (ANCAP) y la Administración Nacional de Usinas y Trasmisiones Eléctricas (UTE) es una posibilidad que ha sido considerada desde hace varios años, y que hoy en día vuelve a ser objeto de debate. ¿Qué ha cambiado desde aquel entonces? ¿Es viable esta iniciativa? ¿Cómo se llevaría a cabo? En este artículo, abordaremos estos y otros aspectos relevantes.

Los primeros intentos de fusionar ambas empresas surgieron en 2002, en el marco del proyecto de ley de Rendición de Cuentas de ese año. Sin embargo, la idea fue retirada debido a la oposición del ministro de Industria de entonces, Sergio Abreu, y el presidente de UTE, Ricardo Scaglia. Ambos coincidieron en que lo mejor era mantener la autonomía de cada entidad.

Hoy en día, a más de 10 años de aquellos intentos, la fusión vuelve a ser un tema de discusión. Esto se debe a diversos factores, entre ellos la necesidad de abordar el cambio climático, la transición energética en Uruguay, así como la redefinición de los cometidos de las empresas energéticas del país.

A pesar de que la idea no está siendo analizada en la actualidad por ninguna de las dos entidades, tanto el sector privado como algunas autoridades de UTE y ANCAP creen que la sinergia entre ambas empresas debe ser mayor.

¿Por qué fusionar UTE y ANCAP?

Como ambas empresas tienen el mismo dueño, el Estado uruguayo, gran parte de los problemas que surgen en una fusión ya estarían resueltos. Además, tanto UTE como ANCAP son empresas energéticas, lo que facilita la integración. De hecho, el presidente de ANCAP, Alejandro Stipanicic, asegura que fusionar ambas empresas “no solo no es descabellado”, sino que además “es lo más conveniente, lo más razonable y lo más natural: debería ocurrir”. Para Stipanicic, lo importante es que el directorio tenga el rol de gobierno, no de gerente, para poder llevar adelante el proceso de fusión.

El oficialismo está afín a la idea de esta fusión

El director de UTE por el Partido Nacional, Felipe Algorta, coincide con Stipanicic en que no es descabellado pensar en una fusión, ya que ambas empresas están preparadas para ello. No obstante, Algorta destaca que hay que tener en cuenta la complejidad del proceso de fusión, que debería ser largo y comenzar con la gobernanza.

“El proceso (de convertir a UTE y Ancap en una única empresa) no sería diferente al proceso de fusión por adquisición que hemos visto en otras empresas del mundo, vemos (en el sector) corporaciones que se compran unas a las otras o que se unen en joint venture (empresa conjunta que trabaja en pos del mismo objetivo) y empiezan a tener un gobierno único”, explicó Stipanicic en una nota del diario El País.