Deforestación en la Amazonia alcanza su tasa más alta en 11 años

Las últimas cifras, provenientes del Instituto Nacional de Investigación Espacial (INPE) de Brasil, no son alentadoras. Utilizando datos satelitales, la agencia concluyó que el bosque perdió 9.762 kilómetros cuadrados en los primeros siete meses de 2019. El número representa un aumento del 29.5% en comparación con el año anterior y la tasa de deforestación más alta desde 2008.

También es la prueba más concluyente hasta la fecha de que la deforestación está en aumento gracias a las laxas y negligentes políticas medioambientales del presidente brasileño de extrema derecha Jair Bolsonaro, informó The New York Times.

Bolsonaro ha recortado fondos para agencias clave que ayudan a proteger la selva tropical y ha reducido la aplicación de la ley contra la minería ilegal, la tala y la ganadería.

«El gobierno de Bolsonaro es responsable de cada centímetro de bosque destruido. Este gobierno hoy es el peor enemigo de la Amazonía», dijo el coordinador de políticas públicas de Greenpeace, Marcio Astrini, en un comunicado informado por Reuters.

Selva o dinero

La organización ambiental brasileña, Observatorio del Clima, expresó también su preocupación por el que ya es el tercer aumento más alto en la historia de Brasil, luego de los picos en 1995 y 1998. Pero esta vez, el gobierno parecía menos propenso a actuar sobre los datos.

«A diferencia de lo ocurrido en años anteriores, durante los cuales la tasa aumentó, esta vez el gobierno no anunció ninguna medida creíble para revertir la tendencia», dijo el Observatorio en un comunicado también publicado por NYT.

A pesar de lo poco que parece querer hacer la administración Bolsonaro, el ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, reconoció un aumento en la deforestación y prometió medidas, según Reuters.

Salles culpó a la minería ilegal, la tala y la ganadería y dijo que se reuniría con los gobernadores de los estados amazónicos para llevar a cabo acciones concretas.