¿Inventaron los chinos el fútbol antes que los ingleses?

Nombrar a china en la historia de la invención del fútbol sorprendió a exjugadores del Manchester como Gary Neville o Mike Summerbee, presentes en el encuentro con el presidente chino, sin embargo el director del Museo Nacional del Fútbol británico, Kevin Moore, confirmó dichas afirmaciones.

«Si bien Inglaterra es la cuna del fútbol como lo conocemos hoy en día, siempre hemos reconocido que su origen es chino», dijo Moore mientras recorría el museo junto a Xi.

Durante la dinastía Han ya jugaban el Cuju

Aún se debate el origen preciso del juego, pero se ha establecido como el periodo más probable la dinastía Han (siglos III y II a.C.). Los manuales de entrenamiento militar de la época contenían prácticas físicas con una pelota de cuero rellena de plumas o cabellos que debía lanzarse hacia marcos de red sostenidos por bambú a ambos lados de un campo dándole patadas.

En otros libros de instrucción contemporáneos se habla de una variante del Cuju (también conocido como Ts’u Chü) en el que dos grupos de personas debían sortear a sus contrincantes con la pelota hasta llegar a la meta, que era de igual forma, un marco cuyos palos verticales estaban separados unos 40 centímetros entre sí.

Cuju se traduce del chino tradicional literalmente como «patear una pelota con los pies» y fue popular en el imperio chino por varios siglos, dejando de ser exclusivo de los entrenamientos militares y convirtiéndose en un deporte practicado por la sociedad civil. Su decadencia y desaparición se dieron antes del sigo XVII, durante la dinastía Qing.

Otra versión más moderna conocida se jugaba manteniendo la pelota en el aire durante el mayor tiempo posible y llegó a ser practicado por jugadores profesionales, todo eso relatado en el libro «Los esplendores de la capital oriental», sobre la capital de aquel entonces Keifeng, en el año 1120. En una reciente investigación dirigida por el historiador alemán Hans Ulrich Vogel, se encontaron manuales de los «clubes», que muestran cómo era la vida de los deportistas en ese entonces. Los clubes de cuju tenían entrenadores, managers y capitanes. Sus miembros normalmente eran jóvenes de familias ricas e influyentes, aunque también había jugadores dedicados a ellos como un empleo, que podían contratarse en cualquier equipo sin exclusividad alguna.

El cuju llegó a convertirse en un entretenimiento en los banquetes reales o recepciones de embajadores extranjeros y hasta los emperadores lo jugaron.