Iniciación Rebelión de silencio
Desde que el ser humano habita el planeta, la búsqueda de la trascendencia espiritual ha sido una característica que ha definido su esencia. Mediante diversas formas artísticas como ser las primeras pinturas rupestres, algunas de las cuales podemos apreciar en las viejas cavernas, el hombre ha procurado elevarse de su simple cotidianidad como ser viviente a nivel meramente biológico.
Además de ser un animal más de la escala zoológica, el ser humano se ha diferenciado de las demás especias, entre otras aptitudes, por esa necesidad de trascender a su mera existencia material, para explorar su propio interior en busca de respuestas a sus angustias metafísicas.
En esta denodada búsqueda podemos encuadrar a la poesía, verdadero mecanismo introspectivo que ha utilizado el ser humano desde la invención de la escritura, para dejar constancia tanto de su entorno cuanto de su rico entramado interior.
Ya las civilizaciones más antiguas, como los babilonios, los asirios, los habitantes del antiguo Egipto y otros, legaron a la humanidad hermosos poemas que aún hoy nos permiten entender su forma de pensar y sentir, así como comprender la compleja sensibilidad de aquellas culturas hoy extintas.
En nuestro país, ha existido desde siempre una larga y fecunda tradición poética, desde las primeras coplas gauchescas pasando por la fulgurante y prolífica Generación del 900, hasta llegar a nuestros días. Quizá no pueda hablarse específicamente de una única identidad poética nacional, sino de un múltiple entramado de estilos, corrientes, géneros, una multiplicidad de influencias de distintas épocas y países.
La poetisa María Eugenia Vaz Ferreira es un ejemplo de aquella brillante generación de vates que nos han legado un rico y perenne acervo poético. Por ese motivo, hace ya algunos años atrás, un grupo de entusiastas y apasionados hacedores de poesía decidieron galardonar a la insigne María Eugenia con un certamen internacional de poesía que lleva su nombre.
De esta forma, nació Certamen Internacional de Poesía «Premio María Eugenia Vaz Ferreira», destinado a premiar la creación artística en un género que es sin dudas sumamente complejo.
La obra que nos ocupa en esta oportunidad, es la edición conjunta en la cual se han publicado los poemas galardonados con el primer premio compartido, que ha recaído en las poetisas Malva Bengua, de Uruguay, y Marta Noemí Melero, de Argentina.
La profesora, escritora y compositora Malva Bengua nos deja un puñado de poemas, en la obra titulada «Iniciación». La poesía de Bengua es fresca, ingenua, por momentos alejada de nuestra gris cotidianidad y de nuestras diarias vivencias, para transportarnos a oníricos universos internos.
Es una poesía vinculada a la ilusión propia del niño, a aquella visión pueril, dotada de innegable lirismo, que la poetisa atesora y cultiva entrañablemente desde su más tierna infancia.
En cambio, la obra poética que nos ofrece Marta Noemí Melero, revela una visión más descarnada y angustiosa de la vida, no exenta – de todos modos – de cierta perplejidad ante determinadas situaciones cotidianas.
Es un poemario donde la escritora nos revela un universo de sensaciones, de emociones, algunas luminosas, otras teñidas de una amarga oscuridad, pero siempre en un estilo franco, sin cortapisas, donde la autora desnuda completamente su alma.
La pluma de Melero destila una poesía madura, tanto desde el punto de vista estilístico como desde la variada gama de temáticas abordadas. Por sus versos vemos plasmado el amor, la ausencia, la búsqueda de esa verdad definitiva, pero también la cotidiana lucha por la supervivencia, tanto a nivel material como espiritual.
Esta publicación conjunta, que integran «Iniciación», de Malva Bengua y «Rebelión de silencio», de Marta Noemí Melero, nos ofrece la oportunidad de redescubrir o de conocer la obra de dos creadores tan disímiles en sus estilos y temáticas como similares en su intensa exploración del alma humana.
(Grupo Cultural B.L.A.N.C.O)
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