Daniel Drexler presentó “La Voz de la Diosa Entropía” en el Solís y se va de gira

¿Cómo estás Daniel ?

Muy bien, ya en el cuello de botella previo al inicio de la gira, a millón y todo pasando muy rápido.

¿Cómo nació este disco con ese título tan original y cuál es su mensaje ?

En determinado momento tomé conciencia de que existe una cosa llamada entropía que es como una gran corriente subyacente a todo lo que pasa en el cosmos y que lleva continuamente todo hacia el desorden, hacia la desintegración y la ausencia de información. Todas las estructuras que existen en el universo están permanentemente siendo desafiadas por una gran fuerza que es la entropía y que tiende a desorganizarlas, por lo que nada en el Universo se organiza espontáneamente.

¿Decís que como humanidad estamos todo el tiempo intentando ordenar algo que es caótico de por sí y es imposible de ordenar ?

Exacto, la biología está tratando de generar orden en el universo, la molécula de ADN juntando átomos y armando estructuras cada vez más complejas que permiten la existencia de algo tan extremadamente complejo como es un ser humano, pero todos sabemos que es un contrato a término. Todo el esfuerzo que hacemos permanentemente por ordenar nuestras vidas, ordenar nuestras economías, nuestros vínculos humanos, el propio funcionamiento de nuestro cuerpo es un esfuerzo maravilloso y quijotesco, estamos embistiendo molinos de viento, pero creo es bueno saber que a la larga las reglas del juego son que vamos a terminar desordenándonos. El propio fin del universo va a ser frío, disperso y sin información. Y si uno lo mira desde esa perspectiva, uno dice, uyyy qué cagada, pero entonces tampoco hay que enloquecerse intentando que todo sea perfecto, porque eso es un camino sin retorno hacia el sufrimiento. Entonces, ordenemos, hagamos el esfuerzo, bailemos la vida de la forma mas linda que podamos con alegría, con dolor, con poesía, con creatividad, pero siempre sabiendo que al final de este baile la última voz que se va a oír siempre es la voz de la Entropía. 

Estamos de paso y la vida es un regalo…

La vida es un regalo, misterioso, mágico, extremadamente frágil, y todo aquello que nos ayude a tomar conciencia de lo que vale cada segundo, de lo que vale cada día cuando uno se despierta y observa la salida del sol, todo lo que nos ayude a eso nos ayuda a transitar la vida de una manera un poquito más amable. 

Por eso Relax, Relax…

Por eso relax, por eso llamé a Kevin (Johansen) que es un maestro de esa cuestión “easy goin” californiana, siendo argentino vive en San Francisco, y tiene una enorme profundidad intelectual, filosófica, poética, literaria, y lo lleva todo con una visión un poquito más liviana que la que llevamos acá en el río de la Plata que somos bastante de darle vueltas a las cosas. Me gustó mucho llamarlo por el diálogo y la relación que tengo con él de casi 20 años y siempre me dice: “tranqui Dani, tranqui, tranqui” (risas..) y encaja exactamente con el humor que le quise poner a la canción y al disco en general, que reflexiona mucho con estos temas y a su vez intenta por lo menos ser un disco liviano. La canción “La Voz de la Diosa Entropía” es un reggae como si uno estuviera con un daikiri en la playa con los pies en la arena mirando el horizonte, y al mismo tiempo te digo que la canción tiene como 25 acordes, o sea que esa liviandad es superficial. 

Invitaste a participar también a Vitor Ramil 

Si, otro gran amigo muy querido, ese texto de Caetano lo encontré en Instagram en plena pandemia, un texto absolutamente maravilloso y clarividente como es Caetano, y Vitor me hizo el favor de leerlo él, yo quería su voz, Vitor tiene una cosa dramática “gaúya” (gaucha) del sur, y lo hace sobre un arreglo orquestal marcial de fondo muy denso, y la verdad es que estoy muy contento con esa participación.

¿La gira por Brasil, Argentina, México y España cuándo culmina ?

Hay una pequeña parada en el mundial (de fútbol) donde obviamente vamos a estar todos imantados frente a la pantalla mirando a ver cómo nos va. En esta primera etapa voy a hacer las cuatro ciudades centrales de este movimiento artístico, que son San Pablo en Casa Natura (20 de octubre), que es un teatro precioso y muy importante de la ciudad, después vamos al teatro San Pedro, típico teatro de la plaza, un teatro italiano de herradura de Porto Alegre (28 de octubre), sería como el Solís de Porto Alegre, y después voy a tocar en el teatro Astro por primera vez, en la avenida Corrientes de Buenos Aires (10 de noviembre). Se trata de una apuesta que me tiene muy emocionado y muy nervioso también. 

Este es tu noveno disco en tu trayectoria artística, cuál es la diferencia de este espectáculo con respecto a los anteriores ?

Creo que los músicos somos un poco tarados a veces, muchas veces nos vemos mirando el acorde que pusimos y cómo afinamos la nota y en realidad cuando empiezas a conocer el ambiente del teatro vas descubriendo que hay herramientas expresivas maravillosas que muchísimas veces, yo mismo dejé de lado. No fui consciente de eso. De tanto estar mirándote el ombligo y cuando alguien te mira de afuera, en este caso Abril Pereira (encargada de la dirección escénica), egresada de la EMAD y directora de teatro, te mira de afuera y te dice “no, ese movimiento que estás haciendo ahí no expresa lo que querés expresar con la canción” o “esa forma en que pusiste los ojos está equivocada” o “esa sonrisa en este lugar no corresponde con lo que estás diciendo”, hay millones de canales expresivos que van mucho más allá de la música, y me interesé en empezar a explorarlos, y los que vayan a vernos al concierto del Solís, van a ver una obra en construcción. Es un camino larguísimo que estoy recién iniciando muy contento de haber encontrado un universo expresivo nuevo en el cual soy totalmente virgen a mis 53 años y que espero irlo desarrollando de acá en adelante. El trabajo con Abril es increíble y voy descubriendo que no tenía conciencia de lo que hice salvajemente arriba de los escenarios durante los últimos 30 años (risas… )

¿Hay otros integrantes del equipo que aportan a la puesta en escena ?

Sí, está también Martín Pisano, un valor increíble muy joven, egresado de la EMAD y siempre quiso ser músico. Martín va a estar manejando el Ableton, disparando secuencias, tocando el teclado, tocando percusión, cantando y obviamente enseñándome sobre esta puesta escénica. Martín te puede mirar de diez formas distintas y expresarte sólo con la mirada diez estados de ánimo diferentes con una claridad absoluta, y esto para mí es un aprendizaje enorme que implicó también hacer un cambio en la estética acústica, o sea del tipo de sonido que vamos a usar. No hay monitores arriba del escenario, llevo un micrófono escondido en el pelo, tengo obviamente monitoreo Linear, las guitarras ninguna va por cable, me puedo mover, puedo girar, puedo ir de acá para allá sin pisotear ningún cable que ha sido un clásico en mi vida en los últimos años, todo eso desde el punto de vista de diseño sonoro y también lumínico, que es diferente a lo que venía haciendo. 

Esto te da mucha más libertad de expresión en todos los niveles

Exacto, este espectáculo tiene una impronta más teatral y estoy recién empezando a construir en ese sentido y espero no quedarme a mitad de camino, para ahí vamos. 

¿Quiénes más están en el equipo?

Juanjo Palacios está haciendo el sonido, y con él estamos haciendo un montón de cosas juntos, toda la versión nueva del software que usamos en el consultorio para el tratamiento de Tinnitus (enfermedad en el sistema auditivo), nos hemos amalgamado, Juanjo es un talento brutal, un tipo que maneja información en muchas dimensiones. Después, las luces las diseñó Ronaldo Treme, un iluminador brasileño muy groso, le hizo las luces a Ronaldinho, a Gail Costa, en Brasil va estar él haciendo las luces y acá Leticia Martínez. Es un equipo muy centrado en la puesta escénica, lumínica y sonora. 

Nos encantaron los nuevos temas y se nota que disfrutaste, se percibe que el artista que llevas dentro va experimentando, evolucionando y madurando. De verte tocar hace unos 20 años en el Taj Mahal en Andes y Soriano donde alguna vez te presentamos… 

Yo creo que estás siendo muy generoso, eso fue hace mucho más de 20 años (risas…)

Y parece que el tiempo no ha pasado

No pasó nada, como bien decís, siempre fue un desafío para mí no repetirme y mantener la ilusión  y la curiosidad viva, esa es una meta que trato de llevar a lo largo de la vida y en este momento con más razón todavía, que todo lo que esté pasando no se transforme nunca en una cuestión alienante que se repita sobre sí misma, eso te puede empezar a aplastar. Se abren puertas, se abrió lo del teatro, una nueva forma sonora, una nueva manera de componer las canciones, una nueva idea fuerte como la del vacío y la entropía. 

¿Tuviste tiempo para reflexionar sobre estas cosas en la pandemia ?

La idea de la entropía ya venía de antes, pero en pandemia leí un libro de Steven Pinker que se llama “En defensa de la ilustración”, que tiene un capítulo que habla sobre la entropía como una gran lucha cósmica entre la biología y la entropía y que al final termina venciendo la entropía. Ese capítulo me partió la cabeza y lo que sí me dió la pandemia fue foco. Venía de una etapa de mucho viaje y la verdad es que meterte con temas densos cuando estás tan liviano , tenés que estar muy parado en una situación donde estás mirando una hoja en blanco, y con tiempo, con dos o tres meses por delante sin nada para hacer. Y por suerte la pandemia, con todo lo horrible que fue rescato ese lado positivo de haber tenido tiempo para estar encerrado en casa, en absoluto silencio y con mucho tiempo para pensar y para escribir. 

Pasemos a lo personal y a tu lado médico

Estoy en un momento muy lindo, mis hijas están grandes, ahora estamos festejando el cumpleaños de 15 de la mayor. Con mis hermanos acabamos de construir una casa en La Paloma en honor a mi madre, la hicimos entre los cuatro. Fluye muy lindo todo entre mis hermanos, nos vamos todos a pasar las vacaciones juntos con una barra de más de 10 sobrinos. Cuando tenía 25 años me imaginaba que a esta edad iba a estar trabajando en un hospital y con mi carrera profesional muy enfocada en ese lado, y con este tipo de vida tan loca que también se sufre, hay días que me levanto y no sé que mierda va a pasar de tarde, hay un nivel de incertidumbre absurdo y muy dinámico con muchas cosas que me nutren. Todo el tema este del Tinnitus que es maravilloso lo que está pasando, nos hemos asociado con una empresa canadiense para seguir con el desarrollo del aparato que inventamos hacia adelante.

¿En qué consiste ese invento ?

Es un aparato que inventé en el ’98 para la estimulación acústica durante el sueño, armamos un grupo grande de científicos, fue un desarrollo muy largo que tuvo apoyo de la ANII y de Estados Unidos. En 2017 ganó la medalla de ingeniería biomédica y se levantaron patentes en varios países de América, Europa, Asia y Oceanía. Y ahora compró todas las patentes una empresa canadiense que se llama Starfish y estamos de vuelta involucrados en ese desarrollo desde nuestro Centro Tinnitus acá en Montevideo, donde hay unas 10 personas trabajando. Hace dos meses el hospital de veteranos de guerra del Estados Unidos lo tomó como tratamiento de referencia para el Tinnitus, que tienen 4 millones de soldados con esta enfermedad. 

¿Cómo haces para manejar al mismo tiempo la ciencia y el arte ?

Pasó algo absolutamente inesperado con todo esto, no fue mi intención traer las cosas para este lado, vinieron solitas, pero sí fue producto de la intersección entre la ciencia y el arte, La propia idea del aparato para el Tinnitus surgió en un estudio de grabación mientras estaba mezclando una canción de mi primer disco “La Llave En La Puerta”, y sin lugar a dudas la medicina y la conexión con el arte me está marcando dramáticamente lo que pasa en la música. De algún lado sale también “La Voz de la Diosa Entropía”, de estar de alguna manera en contacto con ambientes científicos, estamos dirigiendo tesis en Queen Mary University of London, una de las 10 universidades más importantes del mundo, junto a Alberto Capurro. Ahí va a estar exponiendo Juanjo Palacios, que es el sonidista y Martín Pisano también va estar trabajando en este proyecto, o sea se armó una pelota atómica, mi manager también está haciendo toda la parte de comunicación del Centro Tinnitus Montevideo. De alguna manera estos dos mundos que parecían disociados se unieron y está todo fluyendo. Ahora ya no tengo que mentir a nadie, no tengo que decirle a ningún profesor “no mira, ese afiche de Daniel Drexler que está ahí no soy yo, es un primo mío” (risas…).

Has demostrado que la ciencia y el arte no son como el agua y el aceita como muchos piensan, sino que son hermanas gemelas, la música es matemáticas también

Sin lugar a dudas, es muy fácil para un músico resolver temas matemáticos, es llamativamente fácil, hay una cuestión intuitiva a las relaciones de altura entre las cosas y esto está mas que demostrado. Hay estudios canadienses que demuestran que los niños que aprenden música tienen una facilidad para las matemáticas absolutamente superior, seguramente por una cuestión intuitiva con las relaciones de valor. 

Finalmente haz logrado con sensibilidad e inteligencia unir estas dos ramas que atraviesan tu vida, has unido hasta los equipos de trabajo

Por eso le puse “UNO” al último disco de canciones inéditas, anterior al disco “AIRE”. UNO, no es uno del número 1, sino es UNO de unir. De esto me di cuenta cuando tenía 45 o 46 años, me di cuenta que al final no estaba tan mal y estaba en una encrucijada superdinámica que hasta hoy me mantiene permanentemente con sorpresas, es increíble todo lo que está pasando en este momento de mi vida y se lo agradezco en parte a esa encrucijada. 

Muchas gracias Daniel.

Ficha técnica del concierto

Daniel Drexler: voz, guitarra eléctrica, guitarra española.
Martín Pisano: teclados, programaciones y Ableton.
Ingeniería de sonido y Diseño sonoro: José Luis Palacios.
Iluminación: Sofi Episcopo
Diseño de luz: Ronaldo Treme.
Dirección escénica: Abril Pereira Beasley.
Prensa: Sibyla Trabal.
Produce: Diego Coiro, Mapa Produ(c)tora y Analía Monti, Precipicio Agencia.

ACERCA DE DANIEL DREXLER Y SU DISCOGRAFÍA:

Daniel Drexler es reconocido en Iberoamérica como uno de los principales cancionistas de su generación. Lleva más de 20 años presentándose en los principales escenarios y festivales de la canción de Latinoamérica y Europa y ha sido distinguido con el Premio Gardel de la Música (Argentina, 2013), entre otros galardones nacionales e internacionales. Con un pie en sus raíces regionales y otro en el mundo, su trabajo se enmarca en la canción pop con influencia de géneros de la cuenca del Río de la Plata.

“Aire» (2020) fue grabado siguiendo la premisa de no utilizar más que la voz y las guitarras española y eléctrica de Drexler, las percusiones y coros de Wolf -que en algunas canciones sumó su guitarrón- y las voces de Parada y Ferrari. El resultado es una sonoridad que potencia la capacidad de transmitir emoción. Este mismo criterio fue utilizado a la hora de filmar el proyecto audiovisual que acompaña el disco: se eligió un estudio muy amplio con una puesta de luces fija; se registró con una sola cámara en formato cine.

“UNO” (2017) es su séptimo disco, donde incursiona en el universo percusivo y en las esferas emocionales, creando una nueva sonoridad, más ligada al lado “pop” de la canción. Con este trabajo giró por todo el mundo incluyendo Brasil, donde fue el primer músico uruguayo en presentarse de modo solista en el prestigioso auditorio Ibirapuera de San Pablo.

“Tres Tiempos” (2015), es un DVD/ Libro con una selección de 13 canciones grabadas en vivo en los estudios ION de Buenos Aires, junto a un libro sobre el sustrato conceptual de sus tres últimos discos. La gira que arrancó en junio de 2015 en el Auditorio Nacional del Sodre (Montevideo), recorrió más de 60 ciudades en los principales teatros y salas de Uruguay, Argentina, España, Brasil Y Peru.

“Mar Abierto” (2012) fue concebido siguiendo dos referencias centrales: el álbum clásico de Miles Davis “Kind of Blue” y las ideas del pensador polaco Zygmunt Bauman sobre la «Modernidad Líquida». Editado en Uruguay, Argentina y Brasil, recibió el Premio Gardel de la Música Argentina 2013 en la categoría “Mejor Álbum de Música de autor”. Asimismo, fue elegido en la lista de los mejores cinco discos editados en Uruguay por el Diario El País y en la lista de los Mejores discos editados en Brasil. La gira de presentación abarcó más de 90 conciertos en Argentina, Uruguay, México, Brasil, Costa Rica, Estados Unidos y España, en un recorrido que duró dos años y medio.

«Micromundo» (2009) fue editado en España, Argentina, Chile, Uruguay y Brasil. Fue elegido por la prensa española y brasileña como uno de los mejores discos del año. Con «Vacío» (2006), Daniel Drexler cruzó las fronteras de Uruguay y lanzó su trabajo por primera vez en Argentina, España y Chile. Este material, nominado al Premio Gardel de la Música Argentina 2007 por “Mejor Disco Pop Masculino”, fue presentado en ocho países europeos e Iberoamérica. «La Llave en la Puerta» (1998) y «Full Time» (2001) fueron sus primeros discos editados solo en Uruguay.