A siete años de que Gustavo Cerati emprendió su “vuelta por el universo”

Alguna vez Alfredo Le Pera escribió y Carlos Gardel cantó que “veinte años no es nada”, y sí, parece poco tiempo, pero la verdad que siete años de la partida de Cerati, parecen una eternidad, pero ¿en realidad alguna vez se fue el gran músico, el guitarrista, el compositor, interprete y poeta?, porque su música y sus letras parecen cobrar cada vez más vigencia.

Gustavo Adrián Cerati, nació en Buenos Aires, el 11 de agosto de 1959 y fue el creador en 1982, de la banda de rock argentina Soda Stereo, junto con Zeta Bosio y Charly Alberti, uno de los grupos más influyentes en los tempranos años 80’ y tan vigente en la actualidad.

Soda Stereo marcó a más de una generación de jóvenes que entonaban sus letras y bailaban su música, pero también influyó en otros artistas hispanoamericanos.

De la interminable lista de hits de aquella banda ya mítica, que exhibía a tres jóvenes con sus “raros peinados nuevos”, como diría Charly García, se pueden citar, por ejemplo: “Trátame suavemente” (1984), “Nada personal” (1985), “Persiana Americana” (1986), “Signos” (1986), “Cuando pase el temblor (1987), “En la ciudad de la furia” y “Corazón delator” (ambas de 1988) o “Un millón de años luz” (1990). A partir de entonces, Cerati se convertiría en un “heredero del rock argentino de los años 70”, según así lo ha expresado la revista especializada Rolling Stone.

En enero de 1992, tras el final de la “Gira Animal”, la banda estuvo en receso. Sin embargo, sus integrantes iniciaron algunos proyectos personales.

Cerati, junto con Daniel Melero, editó en marzo de 1992 el disco “Colores Santos” del cual se extrae como una gran pieza “Vuelta por el universo”, en la cual quizás comienza a exhibirse el lado más místico del artista.

Al año siguiente apareció “Amor Amarillo”, su primer disco solista, y con participación estelar de Cecilia Amenábar (su primera esposa), del cual se extraen: “Te llevo para que me lleves” y “Lisa”, dedicadas a su esposa Cecilia y a su hija, respectivamente. El álbum también contiene un homenaje a Luis Alberto Spinetta, con una versión de “Bajan”.

Gracias totales

En 1999, a dos años de la separación de Soda Stereo y de su recordada despedida: “Gracias totales”, Cerati editó el disco “Bocanada”, para muchos una obra maestra -una más- grabado en su estudio Casa Submarina y el templo de la música Abbey Road, de Londres.

“Bocanada”, un disco tremendamente armónico, contiene referencias a algo más espiritual y puntos de contacto con el beatle mítico, George Harrison, quien en gran parte de su vida recorrido el camino de la meditación y el hinduismo. Un ejemplo de ello es el sencillo “Puente” en el cual Cerati expresa: “desordené átomos tuyos para hacerte aparecer”, o “arriba el sol, abajo el reflejo de cómo estalla mi alma”. En este tema, se percibe un “slide” de guitarra, muy al estilo Harrison.

Pero sin dudas, “Bocanada” es un emporio de maravillas que reafirman su lado espiritual y su delicada prosa. En “Alma” Cerati plasma otras de las frases más recordadas: “Lo que querías huele a Jardín”; en “Beautiful” nos expresa “mereces lo que sueñas”, y “regreso de soñar”.

Sobre “Bocanada”, Cerati dijo -en el libro 50 años de rock en Argentina, de Marcelo Fernández Bitar (citado por el periodista Gastón Calvo en Infobae)-, que “tiene una atmósfera misteriosa, con momentos de profunda bocanada de aire”.

En noviembre de 2001, presentó el álbum, instrumental “+Bien”, banda sonora de la película homónima, nominado como mejor álbum instrumental pop en los Grammy Latinos. Ese mismo año, publicó “11 episodios sinfónicos” grabado en vivo en el Teatro Avenida, acompañado por una orquesta sinfónica, y en que recreó los más grandes éxitos de Soda Stereo.

Para el 2002 lanzó el disco “Siempre es Hoy” profundizando en un estilo electrónico que ya había delineado en “Bocanada”.

El tema “Vivo” vuelve a lo trascendental del amor: “El fin de amar es sentirse más vivo”, o “y como el fuego reflejado en el agua dibujaba partículas de Dios”. “Sudestada” es otro de los puntos elevados del disco que se compone de 17 temas.

En abril de 2006, Cerati publicó el álbum “Ahí vamos”, en el cual​ las guitarras eléctricas vuelven a ser preponderantes, tras los discos anteriores más electrónicos. Y se sucedieron éxitos, como por ejemplo: “Adiós”, en el cual el músico canta: “no te confundas, no sirve el rencor” o “separarse de la especie por algo superior, no es soberbia es amor”, quizás otra frase que podría ser interpretada con su lado espiritual. En “Lago en el cielo” expresa: “sacudiste las más sólidas tristezas, y respondiste cada vez que te he llamado”. Mientras que sobre “Crimen”, el artista ha dicho que la canción es un “rompecorazones de entrada, una especie de puñalada”. En un momento habla de “los celos otra vez” y remite a “Muchacho celoso” de John Lennon, que para Cerati es la canción de amor “por antonomasia”.

“Ahí Vamos” se convirtió en disco de platino y en México alcanzó el disco de oro. Fue galardonado con cuatro Grammy Latinos, cinco MTV Video Music Awards y ocho Premios Carlos Gardel, a pesar de que el artista cantaba: “Ahora sé lo que es perder”.

El  año 2007 significó la reunificación de Soda Stereo con la impresionante gira “Me verás volver”.

El último disco de Gustavo Cerati fue “Fuerza Natural”, de 2009. Si bien los cortes de difusión fueron “Déjà vu”, “Rapto” y “Magia”, el trabajo presenta otras “perlitas”, como “Sal” o “# Numeral” una canción con un clima muy especial, referencias a la divinidad, a la numerología “los números no mienten” e, incluso, con guiños claros a Harrison cuando dice “nube nueve”. Precisamente, “Cloud Nine” (Nube nueve) es el 11º álbum de estudio de George Harrison, grabado y publicado en 1987, tras cinco años alejado de su carrera musical. En el tema que da título al disco, Harrison expresa: “Te veré allí en la nube nueve. Toma mi esperanza (…)”.

Cerati expresó alguna vez que “Fuerza Natural” estuvo pensado como un viaje. “Un viaje primero interno y luego salir al exterior y conectarse un poquito con el universo”.

Como una premonición, como tantas que parece haber dejado en muchas de sus letras, Gustavo Cerati dijo: “Si yo me retirara ahora, en este momento, no creo que sea muy factible, pero supongamos que sí, me iría contento por “Fuerza Natural”.

El resto es conocido, el 15 de mayo de 2010 sufrió una isquemia cerebral, luego del concierto en la Universidad Simón Bolívar de Venezuela, tras ser internado en el Centro Médico Docente La Trinidad le sobrevino un accidente cerebrovascular.

Cerati permaneció en estado de coma hasta el 4 de septiembre de 2014, día en que emprendió su vuelta por el universo.