Lo que debes saber sobre el huevo y cuál es la mejor forma de cocinarlo

Entre todas las preparaciones, los huevos duros destacan por su versatilidad y popularidad en platos como ensaladas Cobb o sándwiches de ensalada de huevo. Sin embargo, hay mucho más por descubrir sobre este superalimento.

Popularidad de los huevos cocidos:

Un estudio realizado por el blog de alimentos Pantry & Larder en 2022 reveló que, sorprendentemente, los huevos cocidos son la preparación de huevo más buscada en Estados Unidos. De los 50 estados, 30 prefieren los huevos duros sobre los blandos.

Beneficios nutricionales:

Además de su popularidad, los huevos duros son una excelente fuente de proteínas, con 6.3 gramos por huevo grande. También contienen los nueve aminoácidos esenciales para el cuerpo humano, haciéndolos una proteína completa y fácilmente transportable.

Diferencias nutricionales según tipo de cocción:

Aunque podrías pensar que la forma de cocinar los huevos no afecta su perfil nutricional, estudios sugieren lo contrario. Cocinar los huevos a altas temperaturas, como freírlos, puede oxidar el colesterol en ellos, mientras que hervirlos a temperaturas más bajas puede ser más beneficioso para la salud cardiovascular.

Datos interesantes de la historia sobre formas de cocinar el huevo

Los huevos cocidos tienen una larga historia que se remonta a siglos atrás. Desde la invención de la cerámica alrededor del 5000 A.C., han sido un elemento básico en diversas culturas, desde la antigua Roma y Egipto hasta la Europa medieval y el Renacimiento italiano. Previo a la invensión de la cerámica se cocinaban dentro de su cascara (sin romper) sobre las brazas o cenizas calientes.

En resumen, los huevos cocidos no solo son populares, sino que también son una opción nutricionalmente rica y tienen una historia culinaria fascinante que se extiende a lo largo de los siglos. Aquí te dejamos la receta de huevo duro para que te queden perfectos y una exquisita receta gourmet con huevo duro de origen escoces.

Huevos duros perfectos

Ingredientes:

Huevos frescos
Agua
Sal (opcional)

Preparación:

Coloca los huevos en una olla.

Cubre los huevos con agua fría.
(Opcional) Añade una pizca de sal al agua.
Lleva el agua a ebullición a fuego alto.
Cubre la olla y apaga el fuego.
Deja reposar los huevos en el agua caliente durante:
6 minutos para obtener huevos con yema líquida.
8-10 minutos para obtener huevos con yema cremosa.
12 minutos para obtener huevos con yema firme.
Retira los huevos del agua caliente y colócalos en un baño de agua fría para detener la cocción.
Pela los huevos con cuidado, servir tibio.

Consejos:

Para obtener huevos con cáscara más fácil de pelar, añade una cucharada de vinagre al agua.

Puedes usar huevos a temperatura ambiente o directamente del refrigerador.
Si no tienes tiempo para esperar a que el agua hierva, puedes poner los huevos en agua hirviendo y cocinarlos durante 1-2 minutos menos.
Los huevos duros se pueden almacenar en la nevera durante hasta una semana.

No tan sano pero rico: Huevos escoceses vegetarianos con salsa gribiche

Ingredientes:

4 huevos duros
200 g de champiñones, picados
1 cebolla pequeña, picada
1 diente de ajo, picado
1/2 taza de pan rallado
1 huevo batido
Aceite de oliva para freír

Para la salsa gribiche:

2 huevos duros, picados
1/2 taza de perejil fresco, picado
1/4 taza de cebolleta, picada
2 cucharadas de alcaparras, picadas
1 cucharada de mostaza Dijon
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1 cucharada de vinagre de vino blanco
Sal y pimienta al gusto

Preparación:

Para la salsa gribiche: Mezcla todos los ingredientes en un tazón pequeño. Cubre con film transparente y refrigera hasta el momento de servir.

Para los huevos escoceses: En una sartén, saltea los champiñones con la cebolla y el ajo hasta que estén dorados. Sazona con sal y pimienta.

Deja enfriar la mezcla de champiñones y luego envuelve cada huevo duro con una capa de la mezcla. Asegúrate de cubrir completamente el huevo.

Pasa los huevos por el pan rallado para cubrirlos completamente.

Calienta el aceite de oliva en una sartén a fuego medio.

Fríe los huevos escoceses durante unos 5 minutos, hasta que estén dorados por todos lados.

Escurre los huevos escoceses en papel absorbente.

Sirve los huevos escoceses calientes con la salsa gribiche.

Consejos:

Puedes usar tofu firme en lugar de champiñones o una combinación de ambas.

Si quieres que los huevos escoceses sean más picantes, puedes añadir un poquito de chile en polvo a la mezcla de champiñones.

También puedes servir los huevos escoceses con una ensalada verde o con patatas asadas.