Presidente de UNASEV asegura que vino que beben los sacerdotes no aparece en espirometrías

Tras la promulgación de la Ley que establece que un conductor estará inhabilitado para conducir vehículos de cualquier tipo cuando la concentración de alcohol en sangre sea superior a cero gramos por litro, el arzobispo de Montevideo, cardenal Daniel Sturla, pidió a las autoridades, “estudiar la posibilidad de flexibilizar la tolerancia cero en los sacerdotes conductores”.

Es que en las celebraciones católicas, los sacerdotes rememoran la última cena de Jesús comiendo pan sin levadura (hostia) y bebiendo vino.

Tras las afirmaciones de Sturla, en las últimas horas el presidente de UNASEV, Gerardo Barrios, dijo que todos los ciudadanos somos “iguales ante la Ley” y ello “no tiene excepciones”, por lo cual descartó la posibilidad de un trato diferencial para con los sacerdotes.

Por otro lado, Barrios explicó -en declaraciones a radio El Espectador- que cuando un sacerdote imparte una misa, y en forma simbólica puede tener contacto con el vino, “ello no da una espirometría positiva, porque es lo mismo que el alcohol en boca; es decir que se disipa entre los 3 y 6 minutos”.

Remarcó que ello “no es un problema para los curas”.

Catadores

Por otro lado, también se refirió a la situación de los catadores de vinos. Ejemplificó que mantuvo una reunión con 25 catadores de vino en el momento en que degustaban la bebida.

Dijo que se les aplicó el espirómetro, el cual detectó “el alcohol en boca”, pero entre los 3 y 6 minutos siguientes a todos ellos se les fue el alcohol y las espirometrías “pasaron a ser cero”.