Los civiles que colaboraron con la dictadura
El Poder Ejecutivo
Uruguay tuvo cuatro dictadores, tres fueron civiles: Juan María Bordaberry, Alberto Demicheli, Aparicio Méndez.
Ocuparon la Secretaría de la Presidencia: Alvaro Pacheco Seré, Luis Vargas Garmendia, Angel Mario Scelza.
Al frente del Ministerio del Interior estuvieron solamente militares. En el Ministerio de Defensa: Walter Ravena y Justo M. Alonso. En Relaciones Exteriores: Juan Carlos Blanco, Alejandro Rovira, Adolfo Folle Martínez, Estanislao Valdés Otero y Carlos Maeso.
En Economía y Finanzas: Moisés Cohen, Raúl Pazos, Alejandro Végh Villegas, Valentín Arismendi, Walter Lusiardo y nuevamente Végh Villegas que repitió.
En Ganadería, Agricultura y Pesca: Benito Medero, Héctor Albuquerque, Julio Aznárez, Estanislao Valdés Otero, Jorge León Otero, Juan Carlos Cassou, Félix Zubillaga y Carlos Mattos Moglia.
En Trabajo: José Enrique Etcheverry Stirling, Marcial Bugallo, Carlos Maeso y Luis A. Crisci.
Educación y Cultura: Edmundo Narancio, Daniel Darracq, Raquel Lombardo de De Betolazza, Juan Bautista Schroeder y Armando López Scavino.
Industria y Energía: Luis Meyer, Adolfo Cardozo Guani, Francisco Tourreilles, Juan Chiarino Rossi y Felisberto Ginzo Gil.
Salud Pública: Juan Bruno Iruleguy, Justo M. Alonso, Antonio Cañellas y Luis Givogre.
Transporte, Comunicaciones y Turismo: Francisco Mario Ubillos, cuando se transformó en Transporte y Obras Públicas, estuvieron Eduardo Crispo Ayala y Eduardo Sampson.
En el Ministerio de Justicia, creado por la dictadura para terminar con cualquier atisbo de independencia del Poder Judicial, estuvieron: Fernando Bayardo Bengoa, Julio César Espínola y Enrique Frigerio.
Varios civiles ocuparon las subsecretarías de los ministerios de la dictadura: Roberto Augusto Neri, Luis Vargas Garmendia y Jorge Amondarain Mendoza (Interior); Armando Chiarino Aguirre (Defensa Nacional), Guido Michelin Salomón, Enrique Delfante, Julio César Lupinacci, Felisberto Ginzo Gil y Heber Arbouet (Relaciones Exteriores); Ernesto Rosso y Valentín Arismendi (Economía); Lázaro Gurevich, Juan Carlos Cassou y Tydeo Larre Borges (Ganadería); Alfredo Baeza y Ramón Malvasio (Trabajo); Carlos Alberto Roca, Héctor Mario Artucio, Luis Antonio Menafra y Martín C. Martínez (Educación), Elías Pérez (Industria); Mario Arcos Pérez, Jorge Nin Vivó y Luis Nicoletti Torchelo (Salud Pública); José Calatayud Bosch, Heber Arbouet, Juan Pablo Schroeder y Dante Barrios de Angelos (Justicia).
El Consejo de Estado
La dictadura disolvió las Cámaras e ilegalizó los partidos políticos e inventó una verdadera mascarada de Poder Legislativo: el Consejo de Estado.
El primer Consejo de Estado fue designado por Bordaberry y a partir de allí, los miembros eran elegidos por la Junta de Oficiales Generales y los propios consejeros de Estado.
El primer Consejo de Estado fue el siguiente: Martín Recaredo Echegoyen (presidente), Aurora Alvarez de Silva Ledesma, Gladys Freire de Addiego, Maria Luisa Cooighan Sanguinetti, Alberto Demicheli, Aparicio Méndez, Hamlet Reyes, Emilio Siemens Amaro, Julio César Espínola, José Antonio Varela, Jesús Rubio, Daniel Rodríguez Larreta, Juan Rodrígue López, Mario Arcos Pérez, Rodolfo Saccone, Alfredo Lamaison, Mario Gaggero, Raúl Clerc, José Francisco Franca, Osvaldo Soriano, Enrique Viana Reyes, Alfredo Cardoso Arrarte, Eduardo Praderi, Mario Jorge Coppetti, y Jorge Spangenberg.
En 1976 se produjo una importante renovación del Consejo de Estado, quedó integrado de la siguiente manera: doctor Hamlet Reyes (presidente), Aurora Alvarez de Silva Ledesma, Maricos Arcos Pérez, Mario Jorge Coppetti, Julio César Espínola, José Francisco Franca, Mario Gaggero, Eduardo Praderi, Daniel Rodríguez Larreta, Osvaldo Soriano, Enrique Viana Reyes, Jorge Laborde Bercianos, Martín C. Martínez, Willy Patocchi, Blanco Amorós de León de Dutra, José Carlos Brun Cardoso, Marcial Bugallo, Eduardo Crispo Ayala, José Enrique Echeverry Stirling, Bertand Gruss, Rafael Ravera Giuria, Pedro P. Rivero, Alberto Rodríguez Marghieri, Jorge Seré del Campo y Alejandro Végh Villegas.
En setiembre de 1981 con la asunción de Gregorio Alvarez se realiza otra renovación del Consejo de Estado y además se aumentó su número de 25 a 35.
La integración era la siguiente: Hamlet Reyes (presidente), Marcial Butallo, Federico García Capurro, Eduardo Praderi, Walter Belvisi, Norberto Bernachin, Gervasio Gónzalez, Adolfo Gutiérrez, Néstor Bolentini, Pedro W. Cersósimo, Wilson Craviotto, brigadier general Raúl Bendhan, Alberto Aguiar, Hugo Amondarain, Fernando Assuncao, Bernardo Barran, Daniel Barreiro, Domingo Burgueño Miguel, Juan J. Burgos, Eduardo Carrera Hughes, Rodolfo Ciganda, Luis A. Crisci, Waldemar Cuadri, Alfredo De Castro, Milton de los Santos, Eduardo Esteva, Juan Santana Echeverrito, Antonio Gabito Barrios, Manuel Gastelumendi, Carlos A. Gelpi, Alfonso Greissing, Irma Lamanna, Ricardo Milessi, Genaro Perinetti García y Ruben Riani.
Finalmente también integraron el Consejo de Estado completando una nómina de 113 a lo largo de toda su historia: Jorge Amondarain Mendoza, María Ruth Andrade Ochoa, Enrique Arocena Olivera, Dardo Casas del Río, Alberto del Pino Borallo, Luis O. Dini, Juan P. Ferreira, Werther Martínez, Miguel Pereira Serra, Cesalino Silveira, Armando Barhaburu Bagalciague, Jorge Borlandelli, Gilver Cagnone, Francisco Cantou, Eduardo Galagorri Bruche, contralmirante Víctor Gónzalez Ibargoyen, Antonio Guerra, Hugo Manini Ríos, Julio César Michelli, Pablo Millor, Daniel Ordoñez, Víctor Ortiz, Miguel Peirano, Ridcardo Reilly Salaverry, Emilio Sader, Nelson Simonetti, Atanasildo Viera y Ariel Villar.
El «Poder» Judicial
A partir del Acta Institucional número 8 y la creación del Ministerio de Justicia, el Poder Judicial perdió toda su autonomía. Los magistrados al asumir sus cargos juraban respeto a las actas institucionales de la dictadura y no sólo a la Constitución. La Suprema Corte de Justicia perdió la primera parte de su nombre y se llamó Corte de Justicia.
En 1977 la Suprema Corte estaba integrada por: Francisco Jos, Marcora, Romúlo Vago, Carlos H. Dubra, José Pedro Gatto de Souza y Sabino Dante Sabini.
En 1984 al final de la dictadura sus integrantes eran: Rafael Adiego Bruno, José Pedro Gatto de Souza, Ramiro López Rivas, Sara Fons de Genta y Juan José Silva Delgado. También integraron la Corte durante la dictadura, José Pedro Igoa, Eric Colombo y Enrique V. Frigerio.
En 1977 integraban el Tribunal de lo Contencioso Administrativo Miguel Férnandez Viqueira, César Canessa Etcheverry, Alberto Reyes Terra, Ramiro López Rivas y Víctor Maestro Toletti. En 1984 eran sus miembros: Víctor Maestro Toletti, Orlando Olmedo, Francisco D´Angelo, Héctor Clavijo y José Julio Folle. También integró este organo Hilda Moltedo de Espíndola.
Los intendentes interventores
La intervención de las comunas estuvo reservada fundamentalmente a militares, para ser interventores tenían que tener el grado de coronel, pero con todo hubo civiles que alcanzaron ese cargo.
En Montevideo, Oscar Racchetti y Juan Carlos Paysée; en Artigas, Bastillo Borgatto; en Canelones, Gervasio Gónzalez; en Cerro Largo, Juan José Burgos, en Flores, Pedro Ramos Mañe; en Lavalleja, Juan Salaberry Olascoaga y Oribe Pereyra Parada; en Paysandú, Walter Belvisi; en Rivera, Ariel Pereyra y Adolfo Gutiérrez; en Rocha, Milton de los Santos; en Salto, Néstor Minutti; en San José, Juan Chiruchi; en Tacuarembó, Norberto Bernachin y en Treinta y Tres, Ruben Silveira Zuoloaga.
Corte Electoral
La Corte Electoral es
tuvo en desuso, pero igualmente estuvo integrada y funcionado prolijamente. La integraron: Nicolás Storace Arrosa, Camilo Pereyra Urueña, Nelson Vicens Alegre y Ricardo Cerro. La jefa de abogados fue Cristina Maeso y el secretario de asuntos políticos Mario Cataldi.
Entes y Servicios
En los entes fue especialmente claro el predominio militar, hubo incluso algunos cuyos directorios no fueron integrados por civiles, como ANP, Pluna y AFE. Sin embargo también esta área hubo civiles que colaboraron.
En OSE estuvieron: Juan Carlos Payseé, Ricardo Bengoa Rodríguez, Nicolás Goloubinstseff, Pedro Eccheverrigaray, Horacio Paullier Puig, Alberto Barragu, Fasoli y Néstor Russo.
En Antel, Norberto Faroppa, Edison García Regueiro, Isidro Vila, Hugo Federico Aguiar, Carlos Corti Moreno y Antonio Stella.
En Ancap: Bertrand Gruss Dassain, Enrique Víctor Conde, Raúl Manuel Pazos y Alberto Carlevari.
En UTE, Juan José Castro y Marta Casabó.
En el Sodre se desempeñaron: Emilio Massobrio, Eric Simon, Jorge Rodríguez Deluchi e Imazul Fernández.
En el Consejo del Niño: Mario Cantón, Juan Antonio Baglivi, María Teresita Farías de Pastorell y Nelly Violeta Sarasúa de Siqueira.
En el Banco de Previsión Social actuaron, Juan Buccino Clérico, Ricardo Arguello Bellini, Alfredo Lamaison y Jaime Bonsignore. Fueron directores generales de la Seguridad Social: Alfredo Ruiz Popelka y Juan Femenías Iglesias y subdirector, Luis Givogre, quien también estuvo al frente de Asignaciones Familiares, al igual Ruben Gayol.
Los banqueros de la dictadura
En la presidencia del Banco Central estuvieron José Gil Díaz, José María Puppo y Juan Carlos Protassi. Integraron el directorio Carlos Koncke, Luis Romero Diano y Julio César Pacchioti.
En el Banco República estuvieron Moisés Cohen, Raúl Ferraro y Herman Bolívar Castro. El Banco Hipotecario estuvo presidido por Julio César Luongo, a quien acompañaron Ernesto Llovet, Alberto Romaniello y Angel Mario Scelza, además de altos oficiales de la Fuerza Aérea. En el Banco de Seguros actuaron Federico Braum González, Osorio de Salterain, Osvaldo Sánchez Márquez y Carlos Ravenna.
En la Enseñanza
La dictadura creo el Conae que regía la enseñanza primaria, secundaria y técnica, fueron rectores de ese organismo: Elzeario Boix Larriera, Daniel Ferreira y Ramiro Mata; fue director general, Mario Roldós Puis y secretario general Eleuterio González.
Primaria estuvo a cargo de Pedro Freire y Miguel Ribolla; Secundaria de Fernando Bosch, Carlos Pascual y Juan Carlos Laborde y la enseñanza técnica de Enrique Kliche y Miguel Curbelo Platero.
La Universidad Intervenida
Desde su intervención, en noviembre de 1973, la Universidad tuvo como rectores desingandos: Edmundo Narancio, Gustavo Nicolich, Jorge Anselmi, Enrique Viana Reyes, Raquel Lombardo de De Betolaza, Luis Antonio Menafra y Gonzalo Lapido Díaz.
En la Facultad de Derecho fueron decanos: Raúl Abraham, Valentín Sánchez, Luis Sayagués Laso, Manuel Adolfo Vieira, Blass Rossi Masella y Manuel Orlando López. En Medicina: Gonzalo Fernández, Eduardo Anvavitarte, Gonzalo Lapido Diaz y Carlos Oenhinger. En Ciencias Económicas: Jorge Anselmi y Nilo Berchesi. En Agronomía: Adolfo Berro, Daniel Faggi y Armando Rabufetti. En Odontología: Hugo Amorín, Miguel Banchieri, Walter Lieber Belli y José B. Costas.
En Humanidades: Miguel Klapenbach y Rodolfo Gori Carrara. En Arquitectura: Gustavo Nicolich, Reclus Amenedo y Juan José Casal Rocco. En Química: José Delfino Lema, Raquel Lombardo de De Betolazza, Luis Menafra y Firvalier Bassagoda. Ingeniería: Alfredo de Santiago, Juan Carlos Patetta Queirolo, Norberto Faroppa y Héctor Ibarlucca. Veterinaria: Carlos Olave Castro, Gustavo Cristi, Héctor Lazcano, Oscar Latourrette, Mario Argunde y Carlos Muniz.
En la dirección de la Escuela de Servicio Social se sucedieron Alberto Leizagoyen y José Botta Roccatagliata; en la de Psicología estuvo Mario Saiz; en el Conservatorio de Música, Pedro Ipuche Riva; en el Instituto de Economía, Alberto Bensión y en el de Estudios Sociales, Ulises Graseras.
Los diplomáticos
Fueron embajadores de la dictadura, entre otros, Jorge Pacheco Areco, Adolfo Folle Martínez, Carlos Manini Ríos, José Enrique Echeverry Stirling, Edgardo Abella, Raúl Soriano Mesía, Fernando Gómez Fyn, Osvaldo Soriano, Francisco Mario Ubillos, Raquel Lombardo de De Betolaza, Francisco Bustillo del Campo, Buenaventura Caviglia, Alvaro Alvarez, Gastón Sciara Rebollo, Carlos Duarte, Raúl Benavidez y Adolfo Silva.
Carlos Alberto Roca y Carlos Gianbruno fueron representantes permanente ante la ONU; Martín C. Martínez en la Unesco; Mateo Márquez Seré, Carlos Alberto Roca y Francisco Bustillo del Campo ante la OEA.
En la nada sencilla tarea de defender a la dictadura frente a la la Comisión de Derechos Humanos de la ONU estuvieron: Carlos Giambruno, Juan José Real, Zulma Guelman, Luis A. Carrese, Carlos Nadal, Carlos Barros Oreiro, Alvaro Moerzinger, José Calatayud Bosch, Ruben Díaz Porto y Graziella Dubra.
Cargos de confianza
Estuvieron en el Tribunal de Cuentas: Julio V. Canessa, Roberto Lasale, Washington Fernández, Humberto Balletto, Juan José Fraschini, Ulises Morassi y Lliri Pedro Sassi.
En el Instituto Nacional de Colonización, Walter Arias, Tydeo Larre Borges (hijo), Omar Aguirre y Carlos Zitta.
La intervención del Sindicato Médico fue al principio colectiva y estuvo integrada por: Eustaquio Montero, Mauricio Lionel Vidal, Roberto Falchetti, Raúl Bartesaghi y Mario Artecona. Después fue unipersonal y la asumieron, Juan Tarrasa y Mario Genta.
En el Consejo Nacional de Turismo estuvieron, Adolfo Agorio, Jorge Fagel Figari, Julio Jorge Núñez Queirós y Víctor Paullier Martínez.
También tuvieron cargos de confianza durante la dictadura entre otros: José A. Barrio y Ruben Gayol (inspectores generales de Trabajo); Romeo Maeso Sueiro (director de Aduanas); Ernesto Castaldi (director de Migraciones), Jorge Ponce de León Previtalli y Miguel Angel Loureiro (directores de la Contaduría General de la Nación); Danilo Arbilla y Barret Puig (director y subdirector de la oficina de Difusión e Información de la Presidencia de la República); José María Michietti (Seplacodi); Eduardo Peile (INAC); David Manuel Cukierman (tesorero general de la Nación); Manuel Berger (director nacional de Energía); Héctor Volpe (presidente de la Junta de Vecinos de Montevideo); Horacio Parodi (Estadísticas y Censo); César Esperanza y Remigio Dante Gabin, (directores nacionales de Industria); Julio Aznárez (presidente del Plan Agropecuario); Mario Tissoni y Daniel Gamarra (director y subdirector de la Oficina de Servicio Civil); Sarandí J. Silveira (director de Dinacoprin); Raúl Xavier (DGI); Jorge Sienra y Santiago Acuña (directores de Comercio Exterior) y Angela Chiola de Píriz (directora nacional de Trabajo). *
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