Los cigarrillos electrónicos alteran severamente la respuesta inmunológica al suprimir actividad de 358 genes
Un estudio presentado por científicos de la Universidad de Carolina del Norte (EE.UU.) ante la conferencia anual de la American Association for the Advancement of Science celebrada en Washington, afirma que los cigarrillos electrónicos afectan el sistema inmunitario de forma incluso más agresiva que el tabaco convencional.
Según el trabajo presentado, los usuarios de cigarrillos electrónicos con vaporizador, podrían estar poniendo en peligro su respuesta inmune ante otras afecciones, debido a que se ha demostrado la supresión en la actividad de, hasta el momento, 358 genes que operan en el sistema inmunológico.
Los consumidores, están haciéndose potencialmente más vulnerables ante múltiples tipos de enfermedades e infecciones, creen los científicos, algo completamente opuesto a sus intenciones de fumar algo “más sano” y un punto referencial que hasta ahora no ha sido abordado por los fabricantes ni por las campañas publicitarias, afirman los técnicos .
Los cigarros tradicionales suprimen actividad de 53 genes
La capacidad inmunosupresora de los cigarrillos, si bien ha sido uno de los problemas estudiados más recientemente, cuando ya se conocían perjuicios terribles de la adicción a los mismos, no ha dejado de preocupar a los especialistas. Se sabe que los cigarros tradicionales suprimen la actividad de hasta 53 genes vinculados con la inmunidad, pero ahora los nuevos trabajos revelan que la cantidad de genes afectados por el fumar electrónico podría alcanzar en el orden de los 358.
Así lo asegura Ilona Jaspers, a cargo del equipo investigador en la Universidad de Carolina del Norte, que reveló a Ars Technica, que “los cambios de expresión génica que estamos observando son consistentes con una modificación del sistema inmune”.
Las soluciones diluídas de la mezcla líquida empleada en los cigarrillos electrónicos, redujo además la capacidad de eliminación de microbios por parte de las células inmunitarias. Por último refirieron que los aditivos de sabor y aroma que se presentan en los líquidos del cigarro electrónico, también afectan el sistema inmunológico, en tanto la aprobación de que disponen en función de los estudios realizados, es para usos alimentarios y no de inhalación.
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