Pornografía “mejora calidad del semen” pero es “el peor flagelo del siglo”
Si la pornografía es discutida desde que la fotografía en blanco y negro la sacó de los ámbitos más selectivo para hacerla popular y encaminarla a convertirse en uno de los mayores consumos en Internet, la controversia se instala con más ahínco que nunca. Del Biology Letters, donde investigadores australianos aseguran que la pornografía mejora la calidad del semen, a la misma BBC de Londres, cuyo director de un documental sobre el tema la califica como “el peor flagelo del siglo” para la juventud, las puertas del debate no han hecho más que abrirse como nunca antes.
En uno de los extremos del debate, un equipo encabezado por el científico Leigh Simmons, profesor de Biología Evolutiva de la Universidad de Australia Occidental, afirma haber demostrado que las imágenes pornográficas mejoran la calidad del esperma. Tras mostrar imágenes eróticas de mujeres, los varones eyacularon más esperma y de mejor calidad, debido entienden los cientificos, a la competencia.
La simple aparición en imágenes de otro hombre en acción sexual, es suficiente para desencadenar la “competición del semen”, por el subconsciente riesgo biológico que otro macho fecunde la mujer, detallan.
La plaga que reconvirtió a un conductor de televisión
El canal 4 de la BBC británica le encomendó al periodista Martin Daubney un documental sobre la influencia de la pornografía en los adolescentes y su incidencia en la vida cotidiana. La trama transcurre en gran parte en un colegio de los mejores del norte de Inglaterra, donde acudió a una clase sobre educación sexual para adolescentes de entre 13 y 14 años.
El documental muestra como los jovencitos de esta edad, tenían conocimiento de términos pornográficos superior incluso a los adultos en el aula y hablaron “de algunas prácticas sexuales realmente abominables”. Los adultos se mostraron incrédulos que existiera ese tipo de pornografía, pero más aún que “los niños hayan podido verlo”.
Entre las conclusiones a que llegó fue a la “visión distorsionada de los jóvenes sobre las relaciones sexuales: la sexualidad es definida por lo que ven en Internet”. La documental muestra entrevistas a jovencitas de 14 y 15 años, que consideraban “normal” distintas “barbaridades sexuales que son absolutamente ilegales”, detalló.
“Hay chicos cuyas vidas están absorbidas por la pornografía”, sintetizó el autor del video que concluyó definiendo el “claro paralelismo entre la adicción cerebral a la pornografía con la de sustancias como droga o alcohol”. En una convocatoria a través de la redes inició una campaña antipornografía; la BBC irradió el programa pero no se hizo eco de las inquietudes del periodista.
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