Chef gana demanda a McDonalds por vender carne no apta para consumo humano

Las hamburguesas son lavadas con hidróxido de amoníaco, también llamado amoníaco acuoso –un producto utilizado en metalurgia para disolver metales reactivos como el aluminio y el zinc- con la finalidad de que las carnes empleadas en la “especialidad” resulten comestibles.

“Estamos hablando de carnes que hubieran sido vendidas como alimento para perros y después de este proceso se les sirve a seres humanos. Aparte de la calidad de la carne, el hidróxido de amonio es dañino para la salud”, explicó el chef al enterarse de la notificación judicial, a distintos portales internacionales.

La batalla contra la cadena de comidas más grande del mundo

Oliver, considerado el chef activista radical más popular en Gran Bretaña, consideró un logro la sentencia de lo que ha bautizado como “El Proceso de la Porquería Rosa”, en todas sus apariciones públicas.

Una vez que demostró cómo se hacen las hamburguesas, la empresa internacional anunció que “cambiará la receta”, en los países donde se empleaba el sistema, que implicaba el lavado de la carne con el amonio previo a realizar la “torta cárnica” a partir de la cual se hacen las hamburguesas. Después de la decisión judicial, otras cadenas en Estados Unidos (Burger King, Taco Bell) anunciaron que abandonan también el uso de amonio en sus productos.

Ahora el chef la emprendió contra los nuggets de pollo.

“Después de seleccionar las ‘mejores partes’, el resto: grasa, pellejos, cartílagos, vísceras, huesos, cabeza, patas, son sometidos a un licuado –separación mecánica- un  eufemismo que usan los ingenieros en alimentos. Después esa pasta rosada por la sangre, es desodorada, decolorada, reodorizada y repintada, capeadas en algún farináceo y frita, esto es rehervido en aceites generalmente parcialmente hidrogenados, esto es, tóxicos”, explicó.

El proceso de la carne

El Chef Jamie Oliver explica en su programa «Food Revolution», el proceso que se le hace a la carne y sus efectos.