Sexo sin vueltas

Cuando estoy arriba del hombre tengo una eyaculación abundante

Hola Soledad, gracias por mantener este espacio tan interesante, y que ayuda a tantas personas. La consulta que te quería realizar es que muchas veces cuando estoy teniendo sexo y yo estoy arriba del hombre, tengo como una eyaculación abundante, que llega a mojarlo todo a él e incluso las sábanas. En otras posiciones no me pasa eso. Yo no sé de dónde sale ese líquido; parece que fuera de la uretra pero no es orina porque me pasa igual si fui al baño antes de tener la penetración. A mí me gusta que me pase y a mis parejas también, pero quisiera saber por qué en esa posición y no en otra, y también qué es esto, ya que tengo 35 años y antes no me pasaba; hace un par de años que me empezó a ocurrir. Muchas gracias y espero tu respuesta ansiosamente. Un abrazo.

Soledad responde: Hace muchos años que se habla del Punto G, por Grafenberg que a principios del siglo XX describió una pequeña zona en el cuerpo femenino que estaría en el primer tercio de la vagina, con forma de un poroto y que estimulándolo sería fuente de gran placer y de una expulsión de un líquido que no sería orina, pero no se encontró en todas las mujeres, por lo que no se pudo reconocer su existencia a nivel científico.

En forma más reciente se ha encontrado que muchas mujeres, con la excitación sexual generan un líquido abundante que moja la cama, como tú dices y que instantes antes se puede palpar un pequeño bulto dentro de la vagina. Ese líquido se ha analizado pues se temió que fuera orina pero se ha encontrado que contiene entre otros elementos antígeno prostático, por lo que se dedujo que se trata de una pequeña próstata atrofiada, que funciona en instancias en que es estimulada en algunas posiciones coitales, no en todas, de ahí que notes que sólo te sucede esto cuando estás en la llamada «Andrómaca» en que te ubicas encima de tu pareja.

La expulsión de ese líquido se haría vía un conducto cercano al uréter por lo que puede contener algo de orina también. Por otra parte, si bien el término eyaculación estaba reservado en exclusiva para la expulsión del semen, en la actualidad se ha ampliado a la emisión de un fluido de la mujer antes o con el orgasmo.

Pero la forma en que se sabe si es una cosa o la otra es dejándolo secar sobre la sábana, pues la orina deja aureola y la eyaculación femenina no, siendo también diferente el olor.

Está difícil para encontrar buen sexo, ni pagando

Soledad, en el mail de nuestro multimedia (RADIOLUX) recibimos los titulares de RL21 y vimos tu columna SEXO SIN VUELTAS. Te comento que, desde un tiempo a esta parte nuestro país se ha convertido en un lugar donde el sexo ha caído en decadencia, pues no es nada fácil encontrar una relación ni formal ni informal que lo incluya, sea cual sea sus variantes u orientación sexual) en el caso de los varones, que como quien le escribe, sufrimos muy y mucho esta dificultad.

Hemos visto que lo que hoy se hace es el sexo a distancia (masturbación ante imágenes de la pc o celular) Está de moda el intercambio de fotos con ese fin y no con el propósito de conocer a la persona para practicar con ésta algún tipo de relación sexual.

Hay parejas que desde hace un tiempo ponen avisos buscando una tercera persona; en nuestro país, nunca se llega a concretar esta relación, a última hora la pareja se arrepiente.

Si por todo lo anterior, decidimos pagar por sexo, ¡qué fraude! Ni las prostitutas y tampoco los travestis nos satisfacen. Hace unos años, estos eran superiores a ellas y lográbamos una relación satisfactoria, ahora están apurados a los y 5 minutos tienen un pretexto para no seguir, pero no te devuelven el dinero pagado. Esta es nuestra experiencia en el siglo 21.

¿Qué hacemos? Traemos alguna chica de Buenos Aires por 5 días cada 6 o 7 meses con comida y hospedaje pago, y ni nos piden dinero por venir.

Soledad responde: Creo que en parte coincido contigo pero no en todo. Por ejemplo: sé de parejas concretas que recurren con frecuencia a terceras personas o que ya han integrado una con la que se encuentran regularmente.

Pienso que «la decadencia» como le llamas, se debe a que hay muchas otras actividades que hacen vibrar (como el encuentro internético) y que los seres humanos necesitan de esas sensaciones para sentirse bien y las buscan y encuentran de muchas formas, en especial satisface el no comprometerse con nadie y disfrutar lo más posible a nivel individual, sin importar cómo lo vive la otra parte.

Recibo quejas permanentemente de que la mujer demora mucho en excitarse o que el varón es excesivamente rápido y egoísta, o sea que las frustraciones, la comodidad, el riesgo de transmisión de enfermedades, el tiempo disponible, el rechazo por los embarazos y hasta la economía también inciden en que se le vean muchas ventajas a la autoestimulación o autosatisfacción.

(Masturbarse etimológicamente significa profanar con las manos, por lo que prefiero estos términos)

Otra cosa en que no estoy de acuerdo es que sea algo propio del Uruguay. Creo firmamente que esto está extendido por todo casi todo el mundo y cuanto más se perfeccionan los celulares, las tablets, las computadoras y los televisores menos tiempo se le da a la relación sexual física con otras personas, a los deportes, a la lectura, a la comunicación interpersonal, etc. etc. Estoy segura que hay muchas otras actividades que se han postergado y que hace unos años resultaban atractivas e importantes para los seres humanos y podría poner una larga lista.

Resumiendo: no creo que sea un problema exclusivamente local, aunque haya lugares en que el consumismo no sea tan grave como aquí, pero tampoco veo solución en pagar (pasaje y estadía también es un pago) para tener una buena relación sexual sino en buscar la compañía de quienes coincidan con nosotros en la valoración del encuentro sexual.