El Presidente José Mujica participó del acto de graduación de doctores en Medicina , egresados 2011, que se realizó hoy en el Paraninfo de la Universidad de la República. Este año se recibieron 503 médicos y los diplomas se entregaron en dos grupos, uno en la mañana y otro en la tarde. El mandatario definió la cantidad de egresados como “un ejército de médicos” y en tono jocoso añadió que “no debería quedar ni un enfermo”.
Mujica les agradeció a los nuevos profesionales y a sus familias por el esfuerzo de tantos años de carrera, a la UdelaR, al pueblo uruguayo y a los «soldados anónimos que luchan por ganarse el pan, por un puesto». Dijo que la sociedad es una “colmena muy complicada en la que dependemos los unos de los otros”.
En diálogo directo con los jóvenes les pidió que no se acuerden inútilmente de los dolores, de las deudas que puedan tener con ellos, de las heridas que la vida les pueda proporcionar. “Acuérdense de la gente que los necesita. Aquí no puede haber neutralidad. Se puede tener independencia en el campo de las ideas, pero no se puede ser médico y tener independencia en el área de los sentimientos. Lo primero es la gente, y sus necesidades, sobre todo de los que no tienen voz, de los más postergados”, reflexionó.
El Presidente les aclaró que no pide un gesto de generosidad o de altruismo para con los demás, sino que es la mejor recompensa personal sentir que «se transcurre en la vida dándole contenido y causa a la maravilla casi milagrosa de vivir”.
“Envejezcan, llénense de canas, pero no se llenen de porquerías, de callos, de todo eso que la sociedad consumista nos va metiendo arriba. Denle un sentido maravilloso de eterna juventud, de compromiso social. Muchas gracias por lo que han hecho”, culminó.
Más mensajes de congratulación
En el acto matutino, también estuvo el ministro de Educación y Cultura, Ricardo Ehrlich; el subsecretario de Salud Pública, Leonel Briozzo; el rector de la Universidad, Rodrigo Arocena y el decano de la Facultad de Medicina, Fernando Tomasina.
Briozzo definió el discurso de Mujica como “muy sentido” y coincidió con él al pronunciar un mensaje «basado en los valores profesionales, la importancia de la vocación de hacer el bien en esta profesión, lo que corresponde como médico».
Arocena dijo que en educación se construye sobre lo que se ha construido antes. Afirmó que apoyarse en lo mejor, cambiar y mirar a largo plazo tienen que ver con el desafío más grande de la Universidad.
Respecto al futura agregó que la UdelaR procura restringir el ingreso, no cobrar matrícula y que sean cada vez más los que lleguen a la Universidad con una educación de democratizar desde la educación, pero también quiere darles educación de primer nivel vinculada con la investigación y la asistencia, con el uso socialmente valioso del conocimiento. “Ese es nuestro compromiso, modelo abierto, de excelencia”, indicó.
El rector dijo que confía que estos flamantes médicos y médicas sabrán combinar excelencia profesional con compromiso social.
Paciencia: clave de una larga carrera
Luciana Berón, es una joven médica de 31 años. La carrera le llevó 12 años de su vida. Reconoció que al comienzo era más sencillo, porque se arranca con toda la energía, con muchas ansias de estudiar. Luego algún tropezón enlenteció su llegada a la primera meta: recibirse de Medicina General. Hoy su mira apunta hacia otro objetivo: especializarse en Anestesiología.
En diálogo con la Secretaría de Comunicación, reflexionó sobre la elección de la profesión. Dijo que los médicos están bien posicionados a nivel laboral, quizás no tanto a nivel social porque existe mucha crítica.
Definió la paciencia como uno de las bases de esta carrera. Primero paciencia para estudiar y luego paciencia para afrontar al paciente, porque cada persona es diferente. El médico debe tomarse el tiempo para conocerlo y tratarlo de manera adecuada.
En este momento especial, de satisfacción por el logro alcanzado, Luciana se acuerda de su familia, pilar fundamental para que hoy ella sea lo que siempre quiso ser.
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