Silveira pidió protección

«Trate de sacarlo de acá», advirtió ayer a un «facultativo», el militar retirado en situación de reforma, Ricardo Arab, en alusión al coronel retirado Jorge Silveira, luego que el ex integrante de OCOA reclamara públicamente a los responsables del asesinato del maestro Julio Castro a que dieran «la cara». La presunta amenaza realizada por el ex integrante del Servicio de Información de Defensa (SID) de la dictadura en la cárcel de Domingo Arena, llevó a que Silveira pidiera «medidas preventivas» al comisario responsable de la Unidad Penitenciaria Nº 8, Carlos De Melo, según dijeron a LA REPÚBLICA fuentes militares. A través de una nota remitida por Silveira al jerarca policial, se describe la situación que se produjo en la mañana de ayer y le solicita que se den garantía para su seguridad. Sin éxito, LA REPÚBLICA intentó recabar la opinión de otros detenidos en domingo Arena para que dieran sus testimonios.

El coronel en situación de reforma, Gilberto Vázquez y el policía retirado Ricardo Medina declinaron realizar comentarios.

El nivel de tensión en la Cárcel Militar se incrementó a partir del hallazgo de los restos óseos de Julio Castro y del informe forense en el que se señala que fue ejecutado, luego de ser torturado. Si bien Silveira fue separado del resto de los detenidos en Domingo Arena, existe un mal relacionamiento entre algunos detenidos. El único ex integrante de OCOA recluido en el establecimiento penitenciario, es Silveira. En su mayoría, el resto integraban el SID, servicio que es señalado como el que actuó en el operativo que culminó con el secuestro de Julio Castro y la desaparición de María Claudia García de Gelman, entre otros.

Entre tanto, las expresiones de Silveira publicadas en LA REPÚBLICA ayer sábado 3, también generaron repercusión en el Hospital Militar, donde se encuentran internados varios de los procesados por el caso Gelman, el secuestro y desaparición de Adalberto Soba y por el traslado del llamado «segundo vuelo» de detenidos en el centro clandestino Orletti.