CHILE

Uruguay procura replicar con otros países el modelo negociador del Tratado de Libre Comercio con Chile 

El canciller Rodolfo Nin Novoa defendió el Tratado de Libre Comercio que Uruguay pretende firmar con Chile, porque aseguró que nuestro país accede sólo al 7,12% del mercado global de bienes con un esquema de preferencia, cuando el Banco Mundial dice que la media de los países de acceso preferencial al comercio global es del 40%. 

nin-novoaAgregó que con el acuerdo se espera que el flujo comercial de bienes y de servicios se vea beneficiado y se convierta en un mercado de colocación de la oferta exportable global, además, anunció que se procurará replicar el modelo negociador con otros países.

Nin Nova compareció -junto a su equipo de asesores- ante las comisiones de Asuntos Internacionales de ambas Cámaras legislativas para explicar el Tratado de Libre Comercio con la República de Chile.

En tal sentido, el secretario de Estado manifestó que es un acuerdo que aún está en tratamiento y bajo revisión legal. Recordó que las negociaciones comenzaron en febrero pasado.

Adelantó que será rubricado por los cancilleres en octubre, para después enviarlo al Consejo de Ministros y recién a partir de ese momento se elaborará el proyecto de Ley que será enviado al Parlamento.

Nin Novoa dijo que al Gobierno e interesa un TLC con Chile porque hay una realidad que es incontrastable: “En la actualidad, el Uruguay accede solamente al 7,12% del mercado global de bienes con un esquema de preferencia”.

Añadió que según el Banco Mundial, la media de los países de acceso preferencial al comercio global es del 40%.

“Un ejemplo es Chile, que a través de sus acuerdos “obtiene acceso preferencial al 70% del comercio global, mientras Uruguay solo alcanza al 7%. Sacando ese 7%, sobre el resto de lo que vendemos hay que pagar”, ejemplificó.

El canciller resaltó que uno de los objetivos del Gobierno es “tratar de mejorar las condiciones de acceso a los mercados internacionales, evitando gran parte del pago de aranceles, que en definitiva resienten la actividad económica y, por lo tanto, impactan en el empleo”.

Agregó que las exportaciones al MERCOSUR representan el 23% de las ventas de Uruguay al mundo, el restante 77% se exporta fuera del bloque regional, “con limitadas preferencias arancelarias, en algunos casos por tratados firmados con el MERCOSUR, o sin ellas”.

“En virtud de los puestos del MERCOSUR y de nuestro país, no estamos insertos en las nuevas dinámicas de flujo comercial que han tenido lugar en la última década. Por ello, Cancillería ha realizado estos esfuerzos técnicos para profundizar los lazos comerciales con países con los que tenemos un acuerdo marco a nivel del MERCOSUR, que son miembros de ALADI y que tienen un amplio margen de maniobra para mejorar nuestras exportaciones de productos industrializados –carne, lácteos, cítricos, arroz– y nuestra oferta exportable de bienes y servicios”, manifestó Nin Nova.

Siguiendo con esta lógica, Chile ha sido el primer país con el que Uruguay ha concretado la “voluntad política” a nivel de presidentes.

¿Por qué Chile?

Asimismo, el secretario de Estado explicó que se eligió a Chile porque “existen vínculos políticos bilaterales muy importantes, que fueron impulsados en el encuentro entre el presidente Vázquez y la presidenta Bachelet”.

Pero además, “porque este nuevo acuerdo retoma lo ya establecido en el ACE n.º 35 en materia de bienes, que es el único del MERCOSUR cuyo capítulo de bienes está totalmente liberalizado”.

Explicó que también se negocia con el país transandino porque el comercio bilateral tiene un “amplio margen de incremento si se tiene en cuenta la posibilidad de generar cadenas globales de valor por la cercanía geográfica”.

“Además, tenemos ya tres acuerdos que se complementan con este, que son instrumentos que brindan a los exportadores uruguayos un marco jurídico por demás favorable para concretar negocios. Me refiero al Acuerdo de Promoción y Protección de Inversiones, firmado en el año 2010 y ratificado en 2011; al acuerdo sobre compras públicas, firmado en 2009  y ratificado en 2012, y al Acuerdo para Evitar la Doble Imposición Tributaria, que todavía está a estudio parlamentario en la Cámara de Representantes”, detalló según consta en la versión taquigráfica de la reunión.

Nin Nova aseguró también que la corriente de inversión directa chilena en Uruguay registra una “tendencia al alza”.

“Esta es otra de las respuestas a la pregunta de por qué Chile. Con este nuevo acuerdo esperamos que el flujo comercial de bienes y de servicios se vea beneficiado y se convierta en un mercado de colocación de nuestra oferta exportable global”, remarcó.

Estrechar los vínculos económicos comerciales

El secretario de Estado dijo que la entrada en vigor del nuevo acuerdo comercial bilateral va a permitir a Uruguay “estrechar los vínculos económico-comerciales con Chile”.

En el año 2015, Chile fue el destino número 12 de las exportaciones Uruguayas. Los principales productos exportados fueron: Medicamentos, carne bovina y arroz, por un total de  199 millones de dólares.

Entretanto que, Chile fue el origen número 13 de las importaciones que realizó Uruguay. nuestro país compró a Chile bienes por más de 176 millones de dólares, con lo cual quedó un saldo favorable a la balanza comercial uruguaya de 20 millones de dólares.

Uruguay compró a Chile “preparaciones alimenticias, cloruro de sodio, potasio y tomates, entre otros productos”.

Nin Novoa aseguró que también es relevante la posición de Chile como “inversor extranjero directo en nuestro país”.

En 2014, Chile fue el responsable del 2,5% de los flujos de inversión extranjera directa recibidos por Uruguay. “Las empresas chilenas llevan invertidos más de 160 millones de dólares en nuestro país”.

Por otro lado, el canciller dijo que a partir de las negociaciones de este acuerdo con Chile, “la política comercial de Uruguay comienza a hablar el lenguaje propio de las negociaciones comerciales de última generación”.

En la práctica, significa que “por primera vez Uruguay traslada sus posiciones nacionales a un amplio abanico de materias, tales como: coherencia regulatoria, comercio electrónico, medio ambiente, transparencia, anticorrupción, género, y PYMES”.

Destacó que “en el marco de un acuerdo comercial, previo a las negociaciones con Chile, no existía, a nivel nacional, ningún antecedente de una negociación comercial única que concentrara tal diversidad de temas”.

El futuro acuerdo entre Uruguay y Chile descansa en cinco principios básicos: “facilitar la operativa diaria del comercio, consagrar una mayor transparencia en la definición de las normas que rigen los intercambios económicos entre los países, crear espacios para la consulta a la sociedad civil como paso previo a la toma de decisiones en las materias reguladas, incrementar el grado de previsibilidad de la conducta de ambos Estados en la dirección de sus relaciones comerciales, y hacer más transparentes las ventajas del acuerdo a las PYMES, es decir, publicar toda la normativa”, detalló Nin Novoa.

Replicar el modelo negociador con otros países

En otra parte de su exposición ante los legisladores, el canciller aseguró que luego de suscribir el acuerdo con Chile “se procurará replicar el modelo negociador con otros países que ya han manifestado su intención de realizar ejercicios similares de integración, tales como México, Colombia y Perú”.

Indicó que con ellos, Uruguay “ya tiene acuerdos de complementación económica”.

Manifestó que, el hecho de que se pretenda negociar acuerdos comerciales con los países miembros de la Alianza del Pacífico en forma bilateral, “nada tiene que ver con un eventual ingreso de nuestro país a ese bloque”.

“Si deseamos ingresar a ese bloque tenemos que suscribir la Declaración de Paranal, Antofagasta, Chile, que es la que crea la Alianza del Pacífico. Esta secretaría de Estado todavía no está en ese horizonte, aunque sí estamos participando de las reuniones en carácter de observadores”, aclaró Nin Novoa.

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