Uruguay remarca su compromiso en hacer del mundo un lugar más justo, equitativo y seguro

Al haber trascurrido los primeros seis meses desde que Uruguay ocupa un asiento no permanente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, la Cancillería emitió un informe sobre el camino recorrido, y realizó consideraciones sobre el desempeño de nuestro país en dicho órgano, que posee la responsabilidad de velar por el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales.

Desde que Uruguay inició su membresía en enero, ha desempeñado “un papel activo en la generación de consensos en torno a temas de sensibilidad en materia de paz y seguridad internacionales, mediante la defensa de los propósitos y principios tradicionales de su política exterior”, remarca el Ministerio de Relaciones Exteriores en el informe que lleva la firma del canciller, Rodolfo Nin Novoa.

Dichos principios fundamentales son “el fiel reflejo de los valores y el sentir de la sociedad uruguaya y han guiado, y continuaran haciéndolo, la actuación de Uruguay como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de ONU”.

Entre las principales guías de actuación de Uruguay, se destaca el especial énfasis otorgado al “respeto y promoción de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario, “lo cual se ha ubicado en el centro del accionar de Uruguay como miembro no permanente del Consejo de Seguridad”.

También se destaca que su “acérrima defensa ha sido reflejada en el posicionamiento de nuestro país en las consultas y negociaciones que tienen lugar en este órgano”.

Asimismo, Uruguay ha otorgado especial prioridad a “dotar de mayor transparencia a las prácticas del Consejo de Seguridad, convencido de la importancia de que todos los Estados miembros de las Naciones Unidas puedan contribuir más activamente al trabajo de este órgano”.

De este modo, la promoción de métodos de trabajo más transparentes y mayores mecanismos de rendición de cuentas han tenido en Uruguay un activo defensor.

Derecho internacional

Preocupado por la “proliferación de conflictos y amenazas no tradicionales a la paz y a la seguridad internacionales”, Uruguay ha asignado particular importancia al abordaje de las “causas profundas de los conflictos, convencido de que es menester adoptar enfoques integrales a largo plazo, basados en estrategias políticas y socioeconómicas que fomenten la inclusión social, la participación política y la equidad, para hacer frente a los mismos”.

Ello condice con la posición de Uruguay de “otorgar máxima prioridad a las respuestas de la comunidad internacional frente a los grandes problemas del desarrollo sin securitizar en forma excesiva la agenda internacional”.

Nin Novoa agradece a “todos los funcionarios que están dedicados a esta labor, a través de la Misión Permanente de Uruguay ante Naciones Unidas dirigida por el embajador Elbio Rosselli y del equipo que coordina los trabajos desde Cancillería, así como el resto de las misiones y embajadas”.

A la vez, el canciller destaca el compromiso de Uruguay en “continuar realizando los mayores esfuerzos en aras de seguir contribuyendo en las discusiones en curso con miras a fortalecer el sistema multilateral para hacer del mundo un lugar más justo, equitativo y seguro para todos, donde sean plenamente respetados el derecho internacional y los derechos humanos de todas las personas, sin distinciones”.