Frente Amplio promueve proyecto de ley para regular la publicidad electoral y cambiar su forma de financiación

Tanto el Frente Amplio como los partidos de oposición plantearon su preocupación con respecto a la última elección nacional, donde el costo de las campañas electorales fue muy elevado, el tiempo de duración demasiado largo y la ciudad quedó saturada de cartelería.

Leonardo Pereyra, periodista de El Observador, tuvo acceso al proyecto que presentará el Frente Amplio sobre la publicidad de las campañas electorales. Según publicó este lunes, los spots televisivos con candidatos saludando a la gente, las imágenes de banderas flameando, los carteles callejeros y los jingles pasarán a ser historia si se acepta dicha propuesta.

La iniciativa, ya redactada, propone prohibir la publicidad partidaria durante las campañas electorales en todos los canales de televisión. También incluye límites para la propaganda en lugares públicos y elimina la financiación de actividades proselitistas a través de donaciones privadas.

Según el proyecto, las sanciones ante la violación de esas reglas no se limitarán a multas económicas sino que incluirán castigos por parte de la Justicia.

«Proponemos ser líderes en Latinoamérica, transformando a Uruguay en el primer país democrático de la región que privilegia la comunicación directa de los candidatos políticos con los electores por sobre las campañas mediáticas”, dice el borrador de la propuesta frenteamplista, citado por El Observador.

“Las dimensiones de nuestro país, su conectividad territorial, la caracterización sociodemográfica y la tradicional cultura política, democrática y republicana, legitiman explorar modalidades que jerarquicen los contenidos programáticos más que la estética y diseño de los mensajes publicitarios», agrega.

Controlar el financiamiento

Como variante para controlar el financiamiento partidario, el proyecto propone dotar a la Corte Electoral de recursos para crear un departamento de Auditoría, formar una estructura estatal independiente que tenga ese objetivo y darle las atribuciones al Tribunal de Cuentas. La idea es que la tarea quede en manos de una coordinación entre el DGI, el Tribunal de Cuentas y la Corte Electoral.

El objetivo del proyecto de ley es controlar mejor a los partidos, para que la adquisición de dinero para publicidad se haga de forma transparente. Por ello, los senadores del Frente Amplio recuerdan que varios países se vieron involucrados en problemas por tener controles escasos.

«Frente a la constatación de que en varios países del mundo, el financiamiento de los partidos, lamentablemente, ha sido utilizado para corromper el sistema democrático y deteriorar la indispensable institucionalidad republicana, proponemos impulsar la creación de un Observatorio Iberoamericano de financiamiento que promueva la transparencia del sistema democrático, con foco en la relación de los partidos políticos con el dinero, y muy especialmente el que pueda provenir de los centros de poder empresarial y del narcotráfico», propone la izquierda.

Este Observatorio «se nutriría y estaría en permanente coordinación con todas las agencias locales e internacionales que investigan este tema; ello incluye también a organismos internacionales, organizaciones civiles de alcance mundial, regional o local, universidades, fundaciones; asociaciones de periodistas y la Justicia».