Tabaré: “La izquierda es un proyecto de país que requiere un proceso de largo plazo y de cambios estructurales pero tampoco es arbitrario”

Al cierre del Encuentro Nacional de alcaldes, concejales y ediles del FA, donde representantes de los 19 departamentos analizaron y dicutieron sobre los procesos de descentralización y funcionamiento de los gobiernos locales.

Ex intendentes, legisladores nacionales, y otros dirigentes –unos 200 en total- acompañaron la instancia, oportunidad en la que Tabaré recordó los comienzos frenteamplistas en la Intendencia de Montevideo con su primer gobierno  municipal, hasta el presente Ejecutivo y Legislativo impulsores de cambios, así como la perspectiva de una nueva administración frenteamplista a partir de 2015.

“No hay amores fáciles ni libres de conflictos”

Tabaré buscó en esta instancia aventar totalmente diferencias de cualquier índole, en tanto recordó que la fuerza política y el gobierno, mantienen siempre una relación nada fácil. “Sobre la relación fuerza política-gobierno nacional o departamental, en el Frente Amplio hemos producido unos cuantos quilos de documentos y yo no quiero acumular un gramo más a ese peso acumulado. En todo caso, por si algo sirve, debo recordarles que no hay amores fáciles ni libres de conflictos. Al fin y al cabo ser frenteamplista no es una autodefinición, ni un cargo ocasional, es un testimonio permanente y cotidiano de amor al país. Y de lealtad y respeto a todos los uruguayos. Y de afecto a los compañeros. Más que entretenernos con el pasado, miremos el presente y el futuro, y mirémoslo sin autocomplacencia ni autoflagelación, porque la bipolaridad en política también es una patología”, afirmó.

Tabaré recordó que “en el desarrollo del país, todo tiene que ver con todo. En ese todo estamos los frenteamplistas, sin excepciones, los que por elección o designación se desempeñan en cargos de gobierno nacional, departamental o municipal, y los frenteamplistas comunes y corrientes”. Recordó que los cambios solo pueden comenzar “en nosotros mismos”, y apuntó a conservar la esperanza: “Porque a esta colcha de retazos, como nos decían algunos, la une el compromiso y la esperanza. ¡Paradoja!, diría aquel personaje que interpretó Horacio Buscaglia, en aquella campaña de 1989. ¿Y por qué paradoja? Según parece, algunos, que tanto criticaban nuestra colcha de retazos, ahora quieren una para ellos”, enfatizó logrando el aplauso general.

“Lo digo sin petulancia pero con convicción: No puedo imaginarme un Uruguay próspero sin un Frente Amplio vigoroso (…) Aunque lo intento, no conozco un proyecto serio y sistémico alternativo al FA. Griterío sistemático sí, y con una amplificación mediática muy esmerada, pero proyecto político-programático serio, no conozco”, sentenció.