«Lo de Sarkozy no se desprende, ni remotamente, de la declaración del G-20″
El canciller de la República, Luis Almagro, se reunió ayer en las primeras horas de la mañana con el embajador francés en Uruguay, Jean-Christophe Potton, y con el embajador uruguayo en Francia, Omar Mesa, quien luego de las declaraciones de Sarkozy fue convocado de inmediato a nuestro país.
DIARIO LA REPUBLICA
En el encuentro entre Almagro y Potton, el representante francés en Uruguay argumentó, con el propósito de mitigar las afirmaciones del presidente Sarkozy, que sus declaraciones fueron realizadas en el marco de la cumbre del Grupo de los 20 países más desarrollados y en vías de desarrollo (G-20), es decir como vocero de dicho foro y no como mandatario de la nación gala.
Pero el argumento no logró satisfacer las expectativas del canciller Almagro y tampoco del gobierno, luego de que el jerarca planteara, algunas horas después en el Consejo de Ministros, el contenido de su encuentro con Potton, se aseguró a LA REPÚBLICA.
De todas maneras Almagro explicó que de acuerdo a los comentarios que le realizó el embajador francés, «está claro que Francia tiene la visión de que Uruguay no integra ningún paraíso fiscal» o «ninguna lista negra o gris».
El canciller añadió que en el Foro de Transparencia e Información de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) los delegados franceses defendieron a Uruguay y los avances que había alcanzado el país en materia de cooperación e información tributaria.
También señaló que Uruguay tiene acuerdos con Francia sobre «seguridad social e información bancaria».
Sin embargo, el gobierno aguarda una rectificación del gobierno francés para alcanzar «la solución definitiva» al incidente diplomático.
Luego del Consejo de Ministros de ayer en Suárez y Reyes, Almagro calificó la situación como «un hecho político de importancia». Dijo que las declaraciones de Sarkozy son «exageraciones y excesos inadmisibles, tanto la descalificación como la amenaza. Ha existido un error en cuanto a la concepción que tiene de nuestro país».
A la vez, el secretario de Estado calificó de «inadmisible la idea de Sarkozy de apartarnos de la comunidad internacional; eso es algo que definitivamente no pasa ni remotamente, porque Uruguay es un país respetado, con un posicionamiento muy firme en la comunidad internacional, incluso presidiendo varias instancias de negociación de las más importantes que existen en el mundo».
Almagro dijo que ninguna de las consideraciones que realizó el mandatario francés «se desprenden, ni remotamente, de la declaración del G-20, por tanto la estrategia a seguir de parte de Uruguay se mantiene, es decir no se acelera, ni se precipita, ni se cambia».
A la vez, aclaró que lo que se expresó en el comunicado del G-20 «es algo diferente a lo que dijo el presidente francés, quien no evalúo específicamente la posición de Uruguay sobre este asunto».
En tal sentido, Almagro explicó a LA REPÚBLICA que en el párrafo 35 de la declaración del G-20 se «urge a todas las jurisdicciones a que tomen las medidas necesarias para abatir las deficiencias identificadas en el curso de sus revisiones, en particular a las 11 jurisdicciones cuyo marco de trabajo no les ha permitido pasar a la Fase II».
Acotó que en el informe de la OCDE se señalan los progresos que ha tenido Uruguay en la firma de los acuerdos de intercambio de información y «algunas deficiencias» se han identificado en la legislación doméstica y en particular la que refiere al derecho a notificación a quienes pagan impuesto en temas de confidencialidad, y pide la firma de intercambio de información con los socios económicos más relevantes».
Almagro descartó cualquier tipo de injerencia de Argentina. Dijo que el vecino país participó en la firma del comunicado del G-20, donde no consta ninguna afirmación como la que realizó Sarkozy. «Tampoco consta que en los trabajos previos se hubiera hecho una afirmación en ese sentido. Con la información que recibimos podemos decir que esa afirmación es absolutamente temeraria», dijo.
Por su parte, el ministro de Economía, Fernando Lorenzo, expresó que Uruguay reaccionó ante una declaración «puntual que agravió a nuestro país», pero aclaró que no le consta que algo similar haya ocurrido en la reunión del G-20.
«Otra cosa es que a partir del informe previo se pretendía que se realizaran algunos ajustes en la normativa interna, pero eso no puede agraviar desde ningún caso. Aquí lo que provocó la reacción fue lo desmedido y desacertado de las declaraciones realizadas por Sarkozy», dijo Lorenzo.
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