Investigan malformaciones «muy superiores a Hiroshima y Nagasaki» en Irak
El Ministerio de Salud de Irak acordó con la Organización Mundial de la Salud, investigar la multiplicación de las malformaciones congénitas de los bebes de las últimas dos generaciones, cuyos índices son los más altos del mundo.
En las provincias donde la guerra se desató con mayor letalidad, es donde los casos se multiplicaron. Bagdad, Anbar, Basora, Suleymaniya y Diyala, son los puntos que más preocupan a los médicos que carecen además de información completa en tanto en las zonas más pobres las familias se avergüenzan de estos nacimientos y los bebes son enterrados sin registro alguno.
Un estudio de la universidad de Bagdad indica que los casos de malformaciones congénitas se han multiplicado por diez desde el comienzo de las guerras en las que participan fuerzas de la OTAN.
Un estudio realizado por la publicación científica International Journal of Environmental Ressearch and Public Health, con sede en Suiza, asegura que el aumento de mortalidad infantil por leucemia, cáncer y alteraciones en la proporción de nacimientos, son ya muy superiores a las reportadas por los sobrevivientes de Hiroshima y Nagasaki tras las bombas arrojadas en 1945. La leucemia supera en las regiones estudiadas las tasas de países como Egipto o Jordania en hasta 35 veces más.
En un estudio realizado en Londres por directores del hospital de Bagdad con la OMS, se descubrió que todos los afectados tenían altas dosis de uranio empobrecido en el cabello, lo que se ha determinado como la evidencia del uso de armas prohibidas por el derecho internacional entre las fuerzas combatientes.
La muerte sin distinciones
El uranio empobrecido es un componente radioactivo desarrollado por los expertos militares para dotar de mayor penetración a proyectiles y obuses. Con una vida de 4.500 millones de años, el metal pesado ha sido prohibido por la legislación internacional con fines bélicos. Aunque organismos internacionales han exigido a la OTAN que investigue si el componente ha sido usado por sus tropas – y también se pidió hiciera otro tanto para las armas empleadas en 2011 en Libia- la organización mantiene silencio al respecto.
Otro caso es el del fósforo blanco, que se ha utilizado por parte de tropas norteamericanas «para iluminar objetivos durante la noche«. El reconocimiento de haber usado el tóxico que se expande en el aire y causa malformación en fetos de madres intoxicadas, incluso en embarazos posteriores. El arma está también prohibida.
La ciudad de Faluya, donde más se ha utilizado este tipo de armamento según denuncian los iraquíes, tiene en su hospital central, el mayor número de casos de niños nacidos sin cerebro, y sin ojos, de todos los nosocomios con registro en el mundo.
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