Controversias políticas por declaraciones del Papa a su arribo

Mientras las autoridades lo han recibido bajo palio, y el propio presidente debió oir al Papa hablar de los presos cubanos, la oposición le reclama que les atienda para poder pedir por otros presos, pero el visitante no parece proclive a cumplir con tal pedido.

“Llevo en mi corazón las justas aspiraciones y legitimos deseos de todos los cubanos dondequiera que se encuentren, sus sufrimientos y alegrías (…) y de modo especial de los jóvenes y los ancianos, de los adolescentes y los niños, de los enfermos y los trabajadores, de los presos y sus familiares”, dijo Benedicto ante el presidente Raúl Castro que fue a recibirlo al aeropuerto.

“Sociedad abierta y renovada”

El Papa ofició misa en la plaza Antonio Maceo, de Santiago de Cuba, donde se congregaron decenas de miles de personas, en homenaje a los 400 años del hallazgo de la Virgen de la Caridad del Cobre. Raúl Castro se encontraba en la primera fila del oficio religioso.

En su homilía, el Papa hizo una convocatoria al pueblo cubano “para construir una sociedad abierta y renovada, una sociedad mejor, más digna del hombre, que refleje más la bondad de Dios”.

El Papa no escatimó palabras a favor de la Iglesia católica en Cuba, que ha tenido “esfuerzo, audacia y abnegación”, en el trabajo diario para que Cuba aparezca “como lugar en el que Dios se acerca y encuentra con los hombres”.

En toda la ciudad miles de carteles con la consigna “Bienvenido a Cuba, peregrino de la caridad”, adornados con banderas de Cuba y El Vaticano, celebraron el arribo del visitante.