Presidente alemán usó medio millón de euros «amigos» para comprar casa a segunda esposa

Wulff ocultó al Parlamento regional que había tomado prestado de la esposa de un empresario amigo la suma de medio millón de euros. El dinero, fue destinado por Wulff para comprar una casa a su segunda esposa.

El peor error de Wulff –según opinan algunos medios- fue más que el manejo oculto del dinero la furia en que montó contra los periodistas del diario denunciante.

Furia telefónica

Cuando el diario Bild, publicó en portada la noticia, Wulff se encontraba de gira en el Golfo Pérsico; enardecido, llamó por teléfono al director del diario procurando evitar que continuara con la noticia, para lo cual le dejó mensajes en el contestador con amenazas de todo tipo.

El director se limitó a desgrabar las amenazas y compartirlas con otros medios de prensa que participaron del festín informativo.

A poco del hecho, otro medio descubrió que el portavoz y vocero oficial de Wulff, benefició con fondos públicos a un arrendador de residencias, en una de las cuales pasó sus vacaciones.

De inmediato la Justicia alemana le endilgó cargos bajo sospecha de corrupción, los que aún hoy no han sido dilucidados.

Como corolario, un productor de cine que recibió garantías estatales para su emprendimiento, mientras Wulff presidía Baja Sajonia, obsequió con estadías al presidente en un hotel de la isla de Sylt, en el Mar del Norte, uno de los enclaves turísticos más sofisticados y caros de Europa.

La Justicia alemana ha tomado cartas en el asunto y las demandas, en todos los casos, están en marcha.